Sus gritos resaltaron la política de separación familiar; hoy tiene nueva vida

Madre e hija fueron perseguidas por las pandillas de la Mara Salvatrucha en El Salvador.

Alison Jimena fue noticia por su llanto, que colocó en primera plana la política de separación familiar de la administration Trump en junio.

Casi un mes después, fue reunificada con su madre Cindi.

Emocionada, Alison se preparó para asistir al programa navideño de su escuela. Quiere ser como las otras niñas de su edad aquí en Estados Unidos, alistándose para el colegio, haciendo tareas y jugando, en inglés.

Su mamá también está aprendiendo inglés en una iglesia local. Pero son refugiadas y quedarse en Estados Unidos no es fácil. Su abogada Thelma Garcia teme por sus vidas si se les niega el asilo.

Madre e hija fueron perseguidas por las Maras.

Cindi todavía no tiene permiso de trabajo. Están viviendo en casa de sus familiares y manteniéndose económicamente gracias a la ayuda de una organización sin fines de lucro.

La noche de Navidad, Cindi le dio una gran sorpresa para la pequeña Alison: una cama; pero lo que realmente desea para Navidad es poderse quedar en EEUU.

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