Aprueban nuevas medidas para renta de casas vacacionales

Después de una audiencia maratónica, el Concejo Municipal de San Diego aprobó el lunes regulaciones estrictas sobre quién puede operar un alquiler a corto plazo dentro de los límites de la ciudad. Airbnb una de las compañías más grandes de la nación advierte que la industria "será forzada a la clandestinidad" por las acciones del consejo.

El consejo votó 6-3 para aprobar la propuesta del alcalde Kevin Faulconer con dos enmiendas importantes hechas por los concejales Barbara Bry y Lorie Zapf. Según el plan, los residentes pueden obtener una licencia para operar un alquiler a corto plazo para su residencia principal y una licencia adicional para una unidad de vivienda en el mismo terreno que la residencia principal del anfitrión.

Esto pondría fin a la práctica de los propietarios de propiedades fuera de la ciudad que utilizan la industria de alquiler a corto plazo para beneficiarse de las viviendas en San Diego.

Uno de los concejales que votó en contra del plan, Chris Cate, dijo que estaba profundamente decepcionado.

"El Consejo eligió un camino que no solo es inaplicable y está sujeto a impugnación legal, sino que conduciría la actividad a la clandestinidad, resultando en la pérdida de millones de dólares en ingresos que financian oficiales de seguridad pública y la reparación de las calles de la ciudad", dijo Cate.

Zapf sostiene que no fue elegida para representar a inversionistas fuera de la ciudad.

"Creo que la solución es simple. No permitir que los inversionistas de fuera de la ciudad compren nuestros vecindarios, ni que compren nuestras comunidades ", dijo Zapf.

NBC 7 contactó a Airbnb para obtener la reacción de la compañía a la votación. Aquí está su declaración a través de un portavoz:

"La votación de hoy del Concejo Municipal de San Diego es un ultraje para miles de residentes de San Diego responsables y trabajadores, y traerá como resultado millones de dólares en ingresos fiscales perdidos para la Ciudad. San Diego ha sido un destino de alquiler de vacaciones durante casi 100 años y el voto de hoy asegura que la actividad se verá forzada a la clandestinidad y los huéspedes elegirán destinos alternativos, sacando los dólares del turismo de la comunidad. Esperamos trabajar con el Concejo Municipal en los próximos meses para encontrar mejores soluciones para San Diego".

Anteriormente, el consejo rechazó el plan propuesto por el alcalde Kevin Faulconer con una votación de 3 a 6. Los concejales Mark Kersey, Chris Cate y Scott Sherman votaron a favor de la propuesta del alcalde.

Después de la votación final, la oficina del alcalde emitió la siguiente declaración:

"Presenté mi propuesta de compromiso para ayudar al Concejo Municipal a encontrar suficiente terreno común para poder aprobar leyes integrales de alquileres a corto plazo, y con las enmiendas adicionales realizadas hoy, finalmente logramos ese objetivo", dijo el Alcalde Faulconer. Como dijimos una y otra vez, lo más importante es que tenemos un conjunto de reglas establecidas que protegen la calidad de vida del vecindario a través de una mayor supervisión y aplicación".

Las regulaciones aprobadas requieren que los operadores se registren en la ciudad, obtengan un Certificado de Ocupación Transitoria (TOT), obtengan un Permiso de Uso del Vecindario para viviendas de cuatro o más dormitorios y cumplan con la política de Buen Vecino, incluyendo la información de contacto local en la propiedad que están alquilando.

Cualquiera que opere un alquiler a corto plazo debe pagar impuestos locales de turismo y cobrar una tarifa nocturna extra de $2.76 que se destinaría a viviendas asequibles.

Los propietarios actuales a corto plazo no serán protegidos ni compensados ​​por los ingresos perdidos debido a los cambios.

"Para mí, esto es un pisoteo gigante del derecho constitucional a la propiedad", dijo el concejal Scott Sherman.

Las nuevas regulaciones también crearían un nuevo equipo de policías y funcionarios encargados de la aplicación del código para trabajar las noches y los fines de semana para abordar las quejas del código. La ciudad también creará una base de datos para rastrear la licencia y el registro, y lanzará una nueva línea directa para quejas o una aplicación móvil para que los residentes denuncien violaciones a las reglas de la ciudad.

El objetivo es regular los alquileres de compañías como Airbnb y VRBO que, según dicen algunos que se les oponen causan dolores de cabeza a los vecinos y les quitan viviendas que podrían usarse como viviendas asequibles.

El concejal Chris Ward describió el plan aprobado el lunes como un marco introductorio.

"Este es un punto de partida que permitirá a la Ciudad finalmente formar las medidas regulatorias necesarias para abordar las inquietudes de los constituyentes, dar cumplimiento a los malos actores recurrentes y proporcionar una estructura que deje la ventana abierta para revisar en el futuro una vez que se resuelvan las lagunas de los inversionistas". "Ward dijo.

Haga clic aquí para leer más sobre las reglas de cumplimiento y cumplimiento.

Las llamadas de reclamo se recibirán las 24 horas del día, los siete días de la semana, y se creará un portal en línea para denunciar las infracciones. El primer aviso será una advertencia. El segundo aviso puede resultar en una cita. Si alguien recibe tres avisos en un período de 12 meses puede tener su permiso revocado.

Hubo cientos de personas que hablaron en la junta.

El primer orador comparó la industria de rentas de casas vacacionales con Godzilla.

“Esto es un cáncer, está destruyendo nuestros vecindarios y la calidad de vida y la vivienda que hay en nuestra ciudad”, dijo Michael Costello. “Esta es mi cuadra. Existen otras comunidades alrededor de San Diego viendo la misma aniquilación”.

Aquellos a favor, dicen que las preocupaciones están siendo exageradas. Para algunos, las rentas de casas vacacionales son ingresos de los que dependen.

“Las rentas de casas vacacionales me ayudan a vivir. Invertí miles de dólares de mis ahorros, ahorros que irían a mis cuentas de retiro, en mejorar viviendas”, dijo Elizabth Harris.

El concejo había fracasado en su último intento de implementar medidas regulatorias.

En diciembre del 2017 más de 100 personas compartieron sus opiniones en una junta

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