SAN DIEGO (AP) - Un SEAL de la Marina condecorado, quien enfrentaba una sentencia por un cargo de tomarse una foto con el curpo de un militante de 17 años después de ser declarado no culpable de todos los cargos, será liberado por haber sido confinado antes del juicio, determinó un jurado militar el miércoles.
Sin embargo, Edward "Eddie" Gallagher, bajará de rango a Suboficial de Primera Clase (E-6) y su sueldo será reducido. Se le aplicó una multa de dos meses de $2,697.
Mientras Gallagher salía de corte, no aparecía estar contento y no habló con la prensa como lo ha hecho en el pasado. Cuando le preguntaron cómo se sentía con el resultado, dijo: "Me siento bien".
Antes de ser sentenciado, Gallagher le dijo al jurado militar que tomaba responsabilidad por el "ojo negro" que le puso al Cuerpo de Marines y la Marina de EEUU, específicamente los SEALs.
"He cometido errores en mi carrera de 20 años, tácticos, éticos y morales. No soy perfecto, pero siempre me he recuperado de esos errores durante mi carrera. Estoy listo para recuperarme de esto", dijo Gallagher.
El jurado militar había ordenado que Gallagher estuviera confinado por cuatro meses, pero fue liberado el miércoles por haberlo ya estado siete meses antes del juicio. Tras dos horas de deliberar, decidieron a bajarlo a E-6.
El congresista Duncan Hunter, quien es uno de docenas de líderes republicanos que apoyaron a la campaña "Liberen a Eddie", estaba presente en la sentencia.
La campaña "Liberen a Eddie" recibió la atención del presidente Donald Trump.
"Felicidades al Seal de la Marina Eddie Galagher, su esposa maravillosa Andrea, y su familia entera. Han pasado por mucho juntos. ¡Contento que pude ayudar!"dice el tuit.
Después de dos semanas de testimonio, el martes, el jurado alcanzó un veredicto en el juicio contra Edward "Eddie" Gallagher quien fuera acusado de apuñalar a muerte a un adolescente herido militante de ISIS.
El jurado lo encontró no culpable de los cargos de homicidio premeditado, obstrucción de la justicia, intento de homicidio premeditado por presuntamente disparar contra civiles, entre otros relacionados.
Solo se le encontró culpable del cargo de poseer una foto que incluía una víctima humana.
Un testigo, Corey Scott, un médico, sorprendió a la sala de audiencias durante los testimonios cuando dijo que él, y no Gallagher, había matado al militante.
Un marine retirado y un marine en servicio activo testificaron para la defensa el miércoles, describiendo a Gallagher como un guerrero sólido.
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El martes la procuraduría reveló los mensajes del celular de Gallagher donde se mostraba la foto que habría enviado a sus compañeros del militante muerto con una leyenda "tengo una historia interesante que contarles".
La fiscalía dijo que esto era una prueba física que comprobaría que es culpable.
Gallagher ha estado confinado por los últimos nueve meses.
