El presidente Donald Trump podría considerar algunos cambios en la cocina de su lujoso resort Mar-a-Lago, cuando seguramente lo visite este fin de semana, luego de enterarse del resultado de algunas inspecciones a su propiedad.
Los inspectores de salud del estado de Florida encontraron más de una docena de violaciones durante un chequeo realizado el pasado 26 de enero en su propiedad de Palm Beach, según informes publicados recientemente por el Departamento de Negocios y Normas Profesionales de Florida.
Tres de esas violaciones fueron etiquetadas como de alta prioridad, lo que significa que podrían ser la causa probable de enfermedades transmitidas por los alimentos. Sin embargo, el club cumplió con los estándares mínimos para seguir en funcionamiento.
Las violaciones de alta prioridad para el club, que tiene una cuota de membresía de $200,000, fueron:
• Los pescados preparados para ser servidos crudos o mal cocidos, no habían recibido un tratamiento adecuado para destruir los parásitos. Los inspectores ordenaron que el pescado estuviera completamente cocido o desechado.
• Las carnes crudas en dos de las refrigerados del club habían estado por encima de los 41 grados Fahrenheit requerido por regulación, lo que se se convierte en una violación. Se supo que el jamón estaba almacenado en 57 grados, la carne y el pato fueron medidos en 50 y las aves de corral se calentaron en 49. Un refrigerador de pie fue puesto por error en el desescarche, de acuerdo con el informe.
• Los inspectores le ordenaron al personal de la cocina que desocuparan las neveras dañadas y que no volverían a usarlos hasta que fuesen reparadas.
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La inspección se produjo alrededor de dos semanas antes de que el primer ministro japonés, Shinzo Abe, visitara Mar-a-Lago y cenara allí mientras los miembros del complejo hacían fotografías de los dos líderes que respondieron a una prueba de misiles balísticos de Corea del Norte.
Trump también recibió al presidente chino chino Xi Jinping la semana pasada.
"Tomamos la seguridad de los alimentos muy en serio y todos los ajustes y reparaciones menores se hicieron de inmediato", dijo un portavoz de la Organización Trump. "Además, el informe del inspector de salud fue actualizado el mismo día para reflejar que el Club Mar-a-Lago cumplía totalmente con lo requerido".
"Estas infracciones fueron parte de una inspección de rutina y no estaban basadas en quejas", dijo Stephen Lawson, director de comunicaciones del Departamento de Negocios y Normas Profesionales de Florida en un comunicado. "Las infracciones fueron corregidas in situ, y el establecimiento cumplió de inmediato con lo requerido".
A pesar de las frecuentes visitas de Trump a Mar-a-Lago, el club ha incrementado las violaciones desde que el ex magnate inmobiliario entró en la política.
En una inspección de abril de 2016 se encontraron 11 violaciones, aunque ninguna fue considerada de alta prioridad. Se encontraron dos violaciones durante una inspección de diciembre de 2015, cuatro durante un chequeo en abril de 2015, cuatro en diciembre de 2014 y ninguna en junio de 2014. Sólo una violación durante esas inspecciones fue de alta prioridad.
Trump se había visto involucrado a menudo en las operaciones cotidianas del complejo antes de entrar en la política, según el diario The Miami Herald, que fue el primero en informar sobre las violaciones. Trump iría a la cocina y ofrecería instrucciones al personal.
