SAN DIEGO - Muchas tiendas de comestibles en San Diego se están quedando sin artículos de uso diario o les faltan, una situación que ha fluctuado durante la pandemia.
“La semana pasada, no había carne molida aquí”, dijo Diane Woodcock, compradora de San Marcos.
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"Si bien hay muchos alimentos en la cadena de suministro, anticipamos que los consumidores continuarán experimentando interrupciones esporádicas en ciertas categorías de productos, como hemos visto durante el último año y medio debido a los continuos desafíos laborales y de suministro", dijo Greg Ferrara, presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Comestibles.
La escasez se atribuye a una creciente demanda de comestibles, con muchos estadounidenses comiendo en casa durante el aumento de Ómicron, tormentas de invierno paralizando las principales carreteras interestatales e interrumpiendo los suministros, y empleados de fabricantes de alimentos y supermercados enfermos con COVID.
Todd Walters es presidente del sindicato que representa a más de 12,500 trabajadores de tiendas en el condado de San Diego.
“Es un momento muy ocupado y loco para todos nosotros en este momento”, dijo Walters. “Realmente está causando problemas en una multitud de niveles, donde hay trabajadores que tienen miedo de usar todo su pago por enfermedad, eligen ir a trabajar cuando no deberían, lo que hace que otros trabajadores queden expuestos”.
Local
El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, abordó el tema de la cadena de suministro a principios de este mes en Los Ángeles.
"Hasta que dejemos atrás la pandemia, y hasta que tomemos las medidas necesarias para que las cadenas de suministro sean resistentes a largo plazo, seguiremos enfrentando problemas en cualquier mes", dijo Buttigieg.
Algunos clientes de San Diego han estado yendo de tienda en tienda para tratar de marcar los artículos en sus listas.
“Compramos algunas cenas de televisión, por lo que podíamos sustituirlas si no obteníamos lo que queríamos”, dijo el comprador Jerry Rutschman, “pero no tuvimos tanto problema”.
Otros están dispuestos a esperar.
“No lo tienen; no lo tienen”, dijo la compradora Elena Cerda. “Solo espero hasta que llegue el envío”.
