KINGSBURG, California - A una semana de la muerte de Gloria y Gerardo, de 8 y 7 años, en un incendio en Kingsburg, sus padres lamentan su partida y los recuerdan en medio del dolor.
"Hubiera preferido mil veces haberme muerto con ellos", dice Carla Reyes, madre de los dos pequeños y quien ese día intentó sacarlos del inmueble en llamas, lamentablemente sin resultado.
El dolor y la impotencia se apodera de esta madre, quien se culpa de no haber podido salvarlos. Y es que las llamas envolvieron la casa sobre la avenida Kamm, en Kingsburg, durante la mañana del 17 de marzo, y aunque Carla intentó estrellar su camioneta para crear una salida hacia el exterior, no fue posible.
"La niña siempre andaba "give me a hug", ella siempre quería su abrazo y le gustaba mucho acariciarme la barba", recuerda Vicente Reyes de su hija Gloria. "Cuando le empieza a salir pican los pelitos, ella nomás se me arrimaba y se la pasaba tallándome el cachete", dice entre sollozos.
Algunas pertenencias de los menores fueron recuperadas desde la escuela de los niños, puesto que la vivienda que habitaban quedó destruida.
"Los metemos en bolsas como éstas para conservar su esencia", comenta Vicente Reyes al mostrar el pantalón y playera de su hijo Gerardo.
EEUU
Al revisar fotografías y videos de los niños, el matrimonio Reyes vuelve a emocionarse e intenta reponerse a la tragedia.
A la niña le gustaba mucho cantar, mientras que el chico disfrutaba jugando con arena y estar al aire libe.
Los servicios funerarios de los hermanitos Reyes se realizarán el próximo 8 de abril a partir de las 9 a.m.