Uno de los planes del alcalde de Imperial Beach de la ciudad, Serge Dedina, es mantener a la comunidad segura y limpia, es por eso que impulsó una norma municipal para que no haya casas de acampar ni gente durmiendo en las calles.
A pesar de ello, hay quienes dicen les preocupa que estén atacando a las personas sin hogar.
Esta nueva orden aprobada por el concejo el 18 de septiembre regulará y prohibirá casas de campar, alojamiento o dormir en propiedad pública en la ciudad. Además, será ilegal obstruir el paso de banquetas, calles o vías sobre la propiedad privada.
Aún cuando no se especifica que esto es para las personas sin hogar, un activista de San Diego aseguró que la norma iba dirigida hacia ellos
“Cuando veo los comentarios sobre campamentos e higiene, claro que están hablando sobre los vagabundos”, indicó Michael McConnell, defensor de personas sin hogar. “Pueden fingir todo lo que quieran”.
“No está bien que la gente sea restringida así, quieren descansar en algún lugar, también es su ciudad”, mencionó Nakia Lavender, residente.
“Hemos visto alrededor del país cómo los vagabundos son criminalizados”, añadió McConnell. “Muchas comunidades no quieren escoger la ruta más difícil que es proporcionar una solución a largo plazo, invirtiendo en casas y servicios para la gente necesitada”.
Local
En septiembre del 2018, una persona de la tercera edad necesitada, Walter Howard, salió del 7/11 en el centro de San Diego. Dos oficiales de la policía se acercaron a él, después de que pusiera su mochila en el piso de la banqueta.
Howard recibió un citatorio por poner su mochila en propiedad pública.
Para Scott Dreher, abogado, esto significa que las personas sin hogar tienen que cargar sus pertenencias con ellos todo el tiempo, sin tener permiso de ponerlas en el piso.
La nueva orden que se aprobó en la ciudad de Imperial Beach podría ser usada de la misma manera.
“El objetivo es claramente para los vagabundos en una pequeña área de la ciudad, la cual cuenta con 12 personas sin hogar”, señalo McConnell.
Esta orden fue presentada al ayuntamiento de Imperial Beach el 4 de septiembre y fue aprobada el 18 de septiembre de forma unánime. El alcalde Serge Dedina y los cuatro miembros del congreso West, Spriggs, Aguirre y Patton estuvieron presentes en la votación.
Aguirre manifestó inquietudes sobre la salud y la seguridad pública de la ciudad.
“El mes pasado esta ciudad voto en contra de otro baño público en su ciudad”, expresó McConnell. “Realmente cuanto te importa la situación de higiene y la salud pública, si estas rechazando sanitarios públicos”.
