Los Chargers cómo era de esperarse jugaron en un estadio repleto de fanáticos de los Acereros, situación que sin duda no ayuda para un equipo que ha batallado tanto en la ofensiva como en la defensiva.
El primer tiempo fue crucial para los de casa, el mariscal de campo Philip Rivers lanzó un pase para atrás pero corredor Melvin Gordon que no pudo hacerse del ovoide, Devin Bush aprovecharía el error y recuperaría el balón suelto para anotar los primeros seis puntos para los visitantes.
La mala suerte seguiría para los Cargadores y es que en la siguiente serie ofensiva Rivers mandaría otro pase que sería desviado por un liniero defensivo e interceptada por Bush quien terminó siendo la figura del encuentro.
La primera mitad del partido fue desastrosa para los de casa y culminaría con una patada errada de 43 yardas por parte del pateador novato Chase McLaughlin para irse al descanso perdiendo 21 a 0.
Lo rescatable para los cargadores fue sin duda el regreso del ala cerrada Hunter Henry quien estuvo encendido en la segunda mitad y terminaría la noche con 8 recepciones para 100 yardas y dos touchdowns.
Los angelinos se acercaron en el marcador y en los últimos minutos se pusieron 17 a 24 y con más de un minuto recuperarían el balón para hacer un intento milagroso de empatar el encuentro, no fue el caso ya que Rivers mandaría un pase largo buscando a su receptor Mike Williams, sin embargo, el pase estaba fuera del alcance de Williams quien solo vería como el esquinero Camero Sutton interceptaría el ovoide y así darle la victoria a Pittsburgh.
Los Cargadores suman su segunda derrota al hilo por marcador de 24 a 17.
Local
Los Angelinos buscaran reivindicarse el próximo domingo cuando visiten a los Titanes de Tennessee.
