En el área de Cerritos, un hombre con aparentes problemas mentales, murió al recibir por lo menos un disparo de arma de fuego por parte de un policía de San Diego.
Los oficiales atendían un llamado de su propia tía, quien aseguraba la había agredido y ahora la familia pasa por un momento difícil pues dicen que la muerte de Anthony Carolino fue un error. También se lee un cartelón en la calle donde sucedió el incidente, donde aseguran no debió haber sido abatido por la policía.
Los vecinos aseguran que fueron varias detonaciones. El hecho ocurrió en el patio trasero de la casa, donde cayó muerto el hermano de Anthony Carolino. El hermano dice que había un oficial en cada esquina.
Dennis Carolino murió la tarde del sábado al recibir al menos un disparo por un oficial de la policía de San Diego. Su propia tía, una mujer de 70 años llamó al 911 diciendo que su sobrino la había golpeado con un ladrillo.
Su hermano asegura que cuando los oficiales llegaron a la vivienda de la calle Adelaine, en el área de Cerritos, su tía les dijo que él tenía problemas mentales.
Pero, ahora está muerto. La versión de las autoridades es que el hombre de 52 años cargaba una pala de metal. Los oficiales le ordenaron bajarla, pero supuestamente no cooperó. Un oficial le realizeo una descarga con una pistola paralizante, y otro disparó su arma de fuego.
Sus familiares piden acceso a las cámaras corporales de los policías para ver realmente que pasó.
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"Y que no vayan directamente a fuerza letal", dijo Christian Ham, abogado penal.
El incidente se da apenas una semana después de que el gobernador de California firmara una ley más estricta sobre el uso de fuerza letal por parte de la policía.
"La ley es muy clara, la palabra necesaria es una palabra que no existía anteriormente, los oficiales para justificar acciones letales, tienen que justificar que la acción era necesaria para usar ese tipo de fuerza", dijo el abogado.
La familia de Carolino, asegura que no se quedarán con los brazos cruzados.
