SAN DIEGO- Los cinco integrantes de la familia Correa llevan una semana enferma de coronavirus, han sufrido los estragos de la infección, pérdidas económicas, y lo que mas lamentan es que el virus llegó sin tener la vacuna que los protegiera.
“Me siento desesperado”, señaló Jose Fernando Correa, toda su familia esta contagiada de coronavirus.
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La impotencia y consternación se apoderó de Correa.
“Tengo que tratar de ser lo más fuerte que pueda”, reconoció Correa.
Su motivación es su familia, pues ya pasaron más de siete días desde que él, sus tres hijos y su esposa se contagiaron de COVID-19.
“Después de que acabamos de vender, mi esposa se sentía mal, sentía escalofrío”, añadió Correa.
Correa y su esposa Julia se dedican a vender tacos, en Lemon Grove y dijo que constantemente están expuestos al virus.
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“Mi esposa es la que se puso más grave, ella está en el hospital y la tienen con oxígeno”, recalcó Correa.
Desde entonces no suelta el teléfono para saber de su compañera de 27 años.
“Siempre a donde quiera hemos andado juntos y ahorita me siento solo”, afirmó Correa.
Una desesperación que no aguanta, pues no puede trabajar y tiene que darle de comer a sus hijos en casa.
Y hoy solo quisiera regresar el tiempo atrás.
“Nosotros no nos pusimos la vacuna, nos arrepentimos de no habérnosla puesto”, indicó Correa.
