POINT LOMA- Surge el temor durante el fin de semana feriado que algunos se olviden que estamos en una pandemia y que se puedan incrementar los brotes de coronavirus causando que el condado se salga de nuevo de la lista roja del estado lo que ocasionaría nuevas clausuras.
Cada fin de largo en el verano las playas de San Diego reciben cientos de playeros, sin embargo, tras no haberlo podido hacer por varios meses, debido a la orden de quedarse en casa y el intenso calor que se espera este fin de semana se espera que las playas estén abarrotadas por es bueno recordar tomar las medidas de precaución de CDC y observar el distanciamiento social.
Durante el fin de semana largo del Día de los Caídos las playas y restaurantes se vieron repletos por lo que restaurantes están tomando medidas para que no se vea un aumento de casos.
“Por esa razón hemos implementado varios medios de seguridad para asegurar a nuestros empleados e invitados”, aseguró Christopher Gonzáles, cocinero en The Henry.
Gonzáles recordó que hace unos meses, dos de sus empleados resultaron positivos del COVID-19 por lo que además del uso de mascarilla y distanciamiento social, las medidas de salubridad son estrictas.
“Cada media hora suena una campana y los empleados se cambian guantes, lavan manos y todo se desinfecta”, aseguró Gonzáles.
Mientras tanto, algunos museos abrieron sus puertas, presentando otra opción más para disfrutar el puente del Día del Trabajo.
“Después de tantos meses sin venir y sabiendo estaba cerrado, creo me dan más ganas de visitarlo más seguido”, dijo Alex Mojarro, residente de San Diego.
Para evitar aglomeramientos, esta mañana la ciudad de Carlsbad clausuró su estacionamiento en la playa y así permanecerá hasta la noche del lunes.
Según expertos el virus se transmite más fácilmente en interiores y según médicos, muchos contagios se han dado en reuniones familiares.
“Al juntar a gente que no viven en cercanía y están todos juntos el que sean nuestros familiares o amigos cercanos no quiere decir que no porten ellos la infección”, advirtió Paul Schalch Lepe, otorrinolaringólogo.
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“Este no es el momento para bajar la guardia”, dijo Schalch Lepe. "No quiero ser aguafiestas, ni arruinar las vacaciones de nadie".
Quedarse en casa todo el fin de semana puede ser difícil debido a la ola de calor entrante, pero si debe aventurarse fuera de la casa, el Dr. Schalch Lepe, sugiere hacer todo lo posible para permanecer afuera en un espacio abierto, como una playa no tan concurrida.
“En un espacio abierto, el aire no recircula. Tienes la brisa del océano y, a una temperatura más alta, es un poco menos probable que el virus sobreviva durante períodos de tiempo más largos, así que tienes eso a tu favor”, dijo Schalch Lepe.
Pero, solo porque estás afuera no significa que estés fuera de peligro. El riesgo de contraer COVID-19 en la playa aún está presente si hay hacinamiento y si la gente ignora las órdenes de salud pública.
"Si hay mucha gente y la gente no lleva máscaras y hay gente cerca, no es un espacio seguro", dijo.
