TIJUANA- Las restricciones de cruce en la frontera con México se extendieron una vez más, para algunos esto es equivalente a oportunidad de negocio, pues el comercio en Tijuana resulta beneficiado.
No solamente han traído una recuperación para el comercio formal derivado de los consumidores cautivos de este lado de la frontera, sino también para el comercio informal que vieron en la pandemia una oportunidad de emprendimiento a través de las compras personalizadas transfronterizas.
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“Empecé el año pasado, una tía me dijo tráeme leche y otra tía y otra prima y una vecina y luego ya se empezaron a decirle a sus conocidos que yo podía cruzar y que se le traería cosas y sus conocidos empezaron a recomendar y se hizo gigante”, comentó Ericka Cerezo, compradora personal en Tijuana-San Diego.
La pandemia fue detonante para Cerezo, una joven de 23 años recién egresada que decidió realizar compras personalizadas en San Diego para los tijuanenses que no podían cruzar por las restricciones de la frontera desde hace más de un año.
Y con esta extensión hasta el 20 de junio en los cruces no esenciales en la frontera, trabajadoras como ella también se verán beneficiadas.
“Cada que se acerca el 21 me preguntan hoy es vas a seguir haciéndolo yo mientras tenga clientes pues si me dicen sabes que es que aunque abran la frontera yo te voy a seguir encargando porque no tengo Sentri, o yo ya se me venció la visa y no le pude renovar o sabes que yo no quiero hacer la fila”, dijo Cerezo.
Es una forma de comercio informal que ha crecido en los últimos meses en la frontera.
“Al inicio éramos pocos los que yo veía que hacían este tipo de negocio, cada vez hay más gente que empieza dedicarse a esto también”, dijo Gabriela Vega, de compras personalizadas Tijuana.
A pesar de eso, el comercio formal también ha visto una recuperación con el cierre parcial para cruces no esenciales.
De acuerdo con el presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Tijuana, cada año se tiene una fuga de $6,000 millones por residentes que cruzaban la frontera para realizar sus compras habituales en Estados Unidos.
“Al estar cerrada el cruce para los mexicanos Estados Unidos el consumo se queda y apoya a la economía de la ciudad. Son $6,000 millones lo que se consume del consumidor mexicano en el área de San Diego al año una gran parte se queda aquí”, dijo Jorge Macías, presidente de Canaco.
Este servicio de compras personalizadas ha tenido gran auge en la red, y ha sido también un aprendizaje para las compradoras primerizas como Cerezo.
“Me multaron en el SAT por traer tantas cosas porque yo no sabía que existía la franquicia porque yo la verdad no cruzaba. La aduana para salir está muy pesada ahora trato de limitar sabes que nada más 10 artículos por persona o sabes qué, esto lo compré y te costó tanto, lo voy a declarar”, apuntó.
Un promedio de 10 a 12 personas atendidas al día con una comisión del 10% de la compra, a cambio de obtener los productos deseados y en algunos casos evitarse las horas de fila que han crecido a pesar de que solo se permiten cruces esenciales.
“Cuando se vaya abrir yo creo que las filas se van a extender. Hay mucha gente que se le hace más cómodo pagar $15 y sabes qué me evito a las tres horas que hay de línea para comprar la comida o cosas que necesito en Estados Unidos yo creo que va a continuar”, resaltó Vega.
En México este tipo de comercio no está regulado, pues no hay evidencia formal de transacciones por el pago del servicio. Según las compradoras, con o sin restricciones, tal parece que este servicio llegó para quedarse en la frontera, donde las restricciones prevalecerán por lo menos hasta el 20 de junio.
