SAN DIEGO - Los restaurantes de San Diego tendrán más tiempo para asegurarse de que sus secciones de comedor al aire libre cumplan con los códigos de construcción después de que la ciudad decidiera extender ese plazo hasta el 2 de agosto.
Los comedores al aire libre se volvieron muy populares durante la pandemia debido a las directrices de salud para mitigar el contagio de coronavirus de California.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Diego aquí.
Comer al aire libre fue un salvavidas para muchos restaurantes durante el apogeo de la pandemia y, por suerte para los propietarios de pequeños restaurantes, los restaurantes recibieron el visto bueno para crear patios al aire libre siempre que tuvieran las licencias adecuadas.
"Fue la supervivencia", dijo Thomas Patterson, gerente del restaurante The Barn de North Park. “Todos los asientos que tenemos adentro, pudimos ponerlos aquí. Nuestros bartenders, nuestros cocineros, pudimos mantener nuestro empleo y mantener el negocio en marcha ".
Desde el comienzo de la pandemia, la ciudad de San Diego emitió más de 400 permisos para que las empresas expandieran sus servicios en espacios de estacionamiento y aceras. Fue un componente crucial para ayudar a las empresas a sobrevivir, ya que California impuso una capacidad limitada para los servicios en interiores durante meses debido a la pandemia.
Local
Ahora, la ciudad de San Diego quiere asegurarse de que esos parklets sean seguros y cumplan con los códigos estándar de construcción. Aquellos que no cumplan con el código podrían enfrentar multas y perder sus permisos de operar en el exterior.
Las principales preocupaciones en el radar de la ciudad incluyen estructuras no autorizadas, calentadores de propano debajo de las carpas y techos de madera, negocios que bloquean los bordillos rojos a lo largo de la acera y negocios que no cumplen con su permiso original emitido.
El jefe de bomberos también está buscando problemas eléctricos, como cables de extensión estirados sobre las aceras y luces, calentadores e incluso televisores mal conectados.
La ciudad dijo inicialmente en mayo que el personal iría de puerta en puerta a las empresas para informar y educar a los propietarios de restaurantes sobre la próxima aplicación del código. Esa aplicación comenzó el martes para garantizar que todas las infracciones se corrijan o eliminen.
Se está considerando mantener las áreas de comedor al aire libre como un accesorio permanente, pero las discusiones sobre esa posibilidad continúan.
EJEMPLOS QUE PODRÍAN RESULTAR EN UNA MULTA
• Estructuras no permitidas en el derecho de paso / calles de la ciudad no diseñadas, revisadas e inspeccionadas para cumplir con los requisitos del Código de Construcción.
• Calentadores de gas propano líquido (GLP) dentro de carpas y estructuras.
• Problemas eléctricos: circuitos y luces GFCI protegidos contra la intemperie que no están listados para uso en exteriores.
• Carpas no permitidas (400 pies cuadrados o más).
• Materiales que se utilizan para revestimientos de techos que no cumplen con los estándares del Jefe de Bomberos del Estado.
• Extintores de incendios no instalados en carpas y estructuras.
• Acceso de fuego bloqueado a las estructuras permanentes existentes.
• Invasión de bordillos rojos.
• Uso de calentadores de GLP.
• No hay extintores de incendios instalados dentro de la carpa / estructura.
• Plataformas construidas en la calle con paredes y techo añadidos.
• Carpas que no están permitidas y material que se usa sin la etiqueta del Jefe de Bomberos del Estado.
• Artefactos de iluminación que no están clasificados para uso en exteriores.
• Suministro eléctrico que no está protegido por GFCI para uso en exteriores y no es resistente a la intemperie.
Según la ciudad de San Diego, las empresas que incumplan con los permisos Temporales de Operación al Exterior de Empresas (TOBO) podrían recibir un Aviso y Orden de Sanción Civil (CPNO) con una tasa de sanción diaria de $100 por infracción. Las empresas dispondrán de 30 días para que el TOBO cumpla con las normas. Si la TOBO sigue en violación, se programará una audiencia administrativa para evaluar las sanciones, recuperar los costos de ejecución de la ciudad y obtener una orden de cumplimiento.
También tenga en cuenta que la ciudad podría cobrar hasta $300 diarios por la infracción, pero lo ha establecido bajo ya que la intención no es sancionar, sino educar y luego hacer cumplir.
