SAN DIEGO- Durante las últimas dos semanas, Kayla Farley y su familia han estado colocando volantes y compartiendo una alerta plateada de la Patrulla de Caminos de California de su bisabuela desaparecida/en riesgo, Manuela Smith.
El 2 de septiembre, en nombre del Departamento del Alguacil del Condado de Riverside, la Patrulla de Caminos de California (CHP, por sus siglas en inglés) emitió una Alerta plateada, pidiendo a cualquier persona que llamara al 911 si veía a Smith, que mide aproximadamente 4 pies y 10 pulgadas de alto, pesa 140 libras y tiene cabello largo gris y ojos castaño. Su familia está tratando desesperadamente de encontrarla y está pidiendo la ayuda del público.
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“Presentamos carteles, envié publicaciones de Instagram, envié una publicación que compartieron más de 750 personas”, dijo Farley. “Estamos haciendo todo lo posible para averiguar dónde está su paradero”.
Según Farley, Smith vivió por última vez en Hemet con su hija mientras esperaba una nueva vivienda en San Diego, y durante ese tiempo, Smith desarrolló demencia.
“Poco después de eso, ella estaba vagando y confundida acerca de dónde estaba, y decía que quería volver a casa con su hijo menor, que es mi tío, que no tiene hogar”, explicó Farley. “Ella quería regresar aquí, era muy terca al respecto, y todos trataron de mantenerla a salvo en Hemet, pero ella se fue en medio de la noche y nadie sabía a dónde fue, pero de alguna manera logró llegar aquí a San Diego”.
Los familiares de Smith en San Diego dijeron que han recibido numerosos consejos sobre dónde se vio a Smith por última vez, con posibles avistamientos en San Diego, en el centro, Midway District y Hillcrest. Luego, en el Día del Trabajo, la familia obtuvo una pista.
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“Me llamaron a las 3:52 a.m.”, dijo Aimee Zamudio, quien trabaja para la organización sin fines de lucro “Housing 4 the Homeless”, que trata de encontrar un lugar para que se queden las personas mayores sin hogar.
Esa noche, Zamudio se reunió con Smith en una parada de autobús cerca del Hospital Scripps Mercy, donde, según la familia, la mujer de 88 años había ingresado por dolor de espalda y luego fue dada de alta.
“Deberían haberse asegurado de que mi mamá llamara a alguien y que alguien recogiera a mi mamá”, dijo Norma Smith, la hija de Manuela. “Eso es lo que hacen cuando descargas en cualquier otro momento”.
TELEMUNDO 20 se comunicó con el hospital Scripps sobre su protocolo de alta y, en un comunicado, Scripps compartió cómo los hospitales no reciben alertas plateadas de las fuerzas del orden público y que Scripps no da de alta a nadie que muestre una incapacidad para comprender o tomar sus propias decisiones médicas.
Zamudio llevó a Manuela a un hotel esa noche y avisó a sus familiares, pero cuando llegaron al hotel ya era demasiado tarde. La bisabuela desaparecida se había ido.
“O alguien la lastimó, porque la gente ya no es amable con los viejos, y ese es mi peor temor”, dijo Norma entre lágrimas.
Scripps Health también le dijo a TELEMUNDO 20 en un comunicado:
Scripps se asegura de que todos los pacientes estén seguros para dejar el hospital y trabaja con ellos para desarrollar un plan de alta, que incluye darles instrucciones de alta, hacer un seguimiento de las necesidades de atención médica o de salud conductual y brindarles información y acceso a recursos comunitarios para que puedan acceder alimentación, vestido, vivienda y acceso a transporte hasta el destino elegido, según corresponda. Los pacientes están involucrados en la coordinación de su alta. Tienen derecho a la autodeterminación y pueden aceptar o rechazar los recursos ofrecidos.
La Alerta de Plata de CHP enumera a Manuela Smith como de 87 años; sin embargo, los miembros de la familia le dijeron a TELEMUNDO 20 que, de hecho, Smith tiene 88 años.
