TIJUANA- En los últimos 5 meses, poco más de 11,000 migrantes han ingresado a Estados Unidos para dar inicio con la petición de asilo político a través de la frontera de Tijuana, según reveló el informe del gobierno federal.
El delegado único, Alejandro Ruiz Uribe precisó que, de abril al 31 de agosto del 2022, se contabilizaron 11,450 migrantes que han ingresado a Estados Unidos, en su mayoría originarios de México, Haití y Honduras.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Diego aquí.
Cifras que crecen mes con mes, pues las listas de espera de aquellos que huyen de sus lugares de origen, se siguen alargando.
“La presión que sufre Tijuana con el flujo migratorio, con los problemas de distintas regiones tanto de México como del extranjero problemas de violencia un buen número son michoacanos”, señaló Ruiz Uribe.
Ahora, miles de migrantes permanecen varados en la frontera. Es el caso de “María”, quien, aferrada a su fe, huyó con su hijo de 7 años desde Honduras en espera de poder cruzar y obtener un asilo en Estados Unidos.
“Cuesta ingresar muchos inmigrantes ahorita. Sería una bendición para mi hijo estaría más seguro y mi vida también no correríamos ese peligro”, dijo la migrante a TELEMUNDO 20.
Según los datos del gobierno federal, 5,407 de aquellos que han logrado cruzar son mexicanos que tenían ya más de un año esperando según la encuesta de riesgo realizada por la organización “Al otro lado”.
“Los que tienen más tiempo esperando son los que vamos procesando primero ahorita estamos procesando los casos de agosto. Las personas que se registraron en agosto del año pasado”, indicó Soraya Vásquez, subdirectora de “Al otro lado”.
A través del “parole humanitario”, miles de personas han logrado cruzar la frontera legalmente por esta ciudad fronteriza. Un promedio diario de 40 personas que ingresan por la garita del chaparral.
Sin embargo, para la subdirectora del “Al otro lado” esta permanencia legal en Estados Unidos, no es la solución definitiva, sino una válvula de escape del gobierno estadounidense ante el creciente número de solicitantes de asilo humanitario.
“Este permiso es para ingresar de manera legal y permanecen con una condición regular de estancia por un año, pero no tienen derecho a ninguna otra cosa. Porque este es una especie de remedio, de válvula de escape para la presión que hay de tantas personas queriendo ingresar, pero no es la solución, no es que ya se restableció la figura del asilo, no es que la frontera se abrió, todavía hace falta todavía eso, que fue una promesa de la administración de Biden”, indicó Vázquez.
Condiciones que han incrementado los intentos de cruce ilegal a través de una red internacional de traficantes de acuerdo con el gobierno federal.
“No operan extranjeros traficando operan mexicanos traficando que están conectados con otros mafiosos extranjeros para atraer esa gente hasta acá así operan siempre la diferencia de ahora es que están llegando gente a Tijuana de cualquier parte del mundo y vienen conectados con estas bandas”, destacó Ruiz Uribe.
Aunque hay quienes, como Juan Carlos Bernal, migrante originario de Michoacán que prefieren no arriesgar a su familia y esperar lo que sea necesario.
“No es fácil entrar muchos mexicanos queremos llegar y luego, luego acomodarse uno, no, la realidad no es esa, hay que navegar y esperar el turno que le toque a uno, pero yo arriesgar a mi familia por el desierto la verdad no. Es muy peligroso, hay gente que no regresa”, dijo Bernal.
De acuerdo con datos de la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración (EOIR) del Departamento de Justicia de Estados Unidos, al término del primer trimestre del año fiscal 2022, se llegó a un máximo acumulado de 1.5 millones de expedientes de solicitantes de asilo con sólo 578 jueves para procesarlos.
Según la Agencia de la ONU para refugiados, después de Estados Unidos y Alemania, México se coloca como el tercer país con más solicitantes de asilo en el mundo al cierre del 2021, con más de 121,000 solicitantes; cifra tres veces más que un año anterior, y un récord histórico para el país.
