SAN DIEGO- Manifestantes marchan en el centro de San Diego el jueves en tarde por justicia y reforma policial en el sexto día de manifestaciones.
La demostración fue organizada por un grupo de jóvenes afroamericanos de San Diego donde marcharán desde desde la jefatura de policía hasta North Park y viceversa.
"Estamos movilizando una marcha pacífica y una protesta", dijo Víctor, un participante. "Estamos frustrados por las injusticias que la policía ha impuesto a nuestras comunidades y a nuestra gente, nuestros hermanos y hermanas negros".
La gente comenzó a reunirse cerca de la sede alrededor de las 4 p.m. Todos parecían llevar máscaras y carteles que decían "Black Lives Matter".
Las manifestaciones continúan en San Diego como parte de las protestas nacionales por la muerte de George Floyd.
Algunas de esas reuniones se han convertido en disturbios, pero el alcalde de San Diego, Kevin Faulconer, dijo esta semana que los "actos violentos de unos pocos" no representan las protestas pacíficas generales en toda la ciudad.
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"Los sandieguinos tienen el derecho absoluto de reunirse pacíficamente y hablar en contra del racismo sistémico y expresar sus preocupaciones", dijo Faulconer. “La gente quiere un cambio; Ellos quieren ser escuchados. Y quiero agradecer a esos habitantes de San Diego por su disposición a trabajar con el Departamento de Policía de San Diego para protestar pacíficamente”.
En respuesta a los disturbios, otras ciudades del condado han emitido toques de queda esta semana, incluidos Poway, Santee, partes de Spring Valley, partes de Lakeside, El Cajón, Lemon Grove, National City y Coronado. Estos toques de queda generalmente se publican en el sitio web de cada ciudad.
George Floyd, un hombre afroamericano de 46 años, murió el 25 de mayo en Minneapolis bajo custodia policial. Las imágenes de su arresto y su posterior deceso despertaron protestas en múltiples ciudades del país, en tanto mostraron al oficial Derek Chauvin sometiéndole en el piso y apoyando su rodilla en el cuello de Floyd, mientras este gritaba que no podía respirar. Chauvin, junto a otros tres oficiales, fueron despedidos de sus cargos y enfrentan acusaciones tras la muerte de Floyd.
