San Diego

“No podíamos movernos” testigo hace un recuento del sismo de 7.1 grados en México

Una periodista de Telemundo, con sede en San Diego, se encuentra de visita con su su familia en el centro de México, nos dio a conocer que no podía mover los pies cuando la pared de la casa de su familia se derrumbó ante sus ojos durante el terrorífico terremoto de magnitud 7.1.

"Parecía que toda la casa se derrumbaba; se sentía como si la tierra se estuviera abriendo bajo nuestros pies ", Fabiola Berriozábal, productora de medios digitales con Telemundo 20, contó en una entrevista en video de FaceTime con NBC 7." No podíamos movernos, ni ponernos de pie ".

Berriozábal dijo que estaba terminando de comer con su madre, su hermano y sus abuelos en el patio de la casa de su madre en Tepoztlán, una ciudad del estado mexicano de Morelos, al sur de la ciudad de México, cuando de repente la Tierra comenzó a temblar violentamente.

"Me entró el pánico, y luego vi los ojos de mi hermano entrando en pánico también, y luego me di cuenta de lo grande que era el terremoto", explicó. "Lo siguiente que sé es que la tubería se rompió, comenzó a caer agua desde la parte superior del techo."

Desde donde la familia estaba sentada en el patio, Berriozábal dijo que parecía que toda la casa de su madre se derrumbaba. "La casa parece que está cayendo hacia nosotros", dijo. En ese momento, Berriozabal dijo que su abuela se volvió hacia la familia y dijo: "Por favor, sálvense; déjame aquí”.

“Eso te dice lo fuerte que se sintió", explicó. "Tenía miedo porque en realidad se podía sentir, como en el fondo de los pies. No podía quedarme quieta; No pude levantarme.Queríamos alejarnos de la casa, pero realmente no podíamos hasta que se detuvo."

Juntos, Berriozábal y su familia pudieron llegar a salvo, a una zona de césped cerca del patio pero lejos de la casa. Cuando levantaron la vista, se dieron cuenta de que una gran pared de la casa se había desmoronado.

Caminando por la casa de su familia, Berriozábal no pudo evitar ponerse sentimental. En el interior, grandes grietas corrían por las paredes y los escombros, incluyendo trozos de paredes que exponían el ladrillo crudo debajo, estaban esparcidos por la residencia. Marcos de fotos que muestran imágenes de la familia, que estaban colgado en las paredes, ahora estaban en el suelo a lo largo de una escalera.

Berriozábal contuvo las lágrimas, dijo que no podía describir el dolor de ver la casa de su familia dañada de esa manera. Su madre ha vivido allí por 13 años.

Berriozábal dijo que protección civil comenzó a dar vueltas a las casas del vecindario de su madre para comprobar la seguridad de las estructuras. Por ahora, su familia no podrá dormir en el hogar.

En este punto, dijo que no está segura si la casa de su madre puede ser rescatada o si tendrá que ser derribada para ser reconstruida.

En la densamente poblada Ciudad de México, el terremoto provocó que los edificios se agitaran provocando el pánico en la gente por las calles. Muchos huyeron de su edificio de oficinas, abrazándose en las calles para intentar calmarse.

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