SAN DIEGO – La pandemia de coronavirus es un momento estresante para todos, pero sin duda las personas de la tercera edad bajo aislamiento podrían ser de las más afectadas.
Después de dos meses bajo la orden de "quedarse en casa", residencias y hogares para ancianos han identificado señales alarmantes, incluyendo síntomas de ansiedad y depresión.
Para las personas de la tercera edad, las pequeñas interacciones realizadas día con día brindaban una oportunidad para relacionarse con otras personas.
Paul Downey, director de la organización sin fines de lucro Serving Seniors, asegura que estas interacciones sociales marcaban una diferencia para la salud mental de las personas de la tercera edad.
Serving Seniors distribuye alrededor de 6,000 comidas al día para personas de la tercera edad en San Diego.
Es por ello que Downey pide a los voluntarios en Serving Seniors, y cualquier otra organización o voluntarios que interctúen con este sector de la población, presten mayor atención en el comportamiento de estas personas. Sobre todo si perciben algún cambio o síntoma de ansiedad y/o depresión.
Downey asegura que algunos de sus voluntarios le han mencionado como empiezan a notar un cambio tanto físico como mental en las personas que han permanecido aisladas.
"A las personas de la tercera edad no se les permite salir a hacer ejercicio, y los voluntarios ya comienzan a notar el cambio en estas personas, y les causa preocupación", añadió Downey.
Es por ello que se invita a la población a pensar en aquellas personas que están aisladas por su cuenta. Una llamada, un mensaje o alguna otra forma de afecto podría hacer una gran diferencia en su día bajo aislamiento.