TIJUANA- Las playas de Tijuana y Rosarito fueron consideradas en un estudio de la Comisión Estatal Contra Riesgo Sanitarios (COFEPRIS) como no aptas para su uso recreativo durante esta Semana Santa.
Una situación que ya generó diferentes reacciones por parte de autoridades, comerciantes y ambientalistas.
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Este miércoles, las playas de Tijuana contaron con cintas de seguridad y letreros que indicaron que las playas de Tijuana se encontraban cerradas. Sin embargo, la alcaldesa de Tijuana, Karla Ruiz McFarland confirmó que éstas abrirán este 1 de abril, a pesar de los niveles de contaminación registrados.
“La instrucción de la secretaría de salud es abrir, mañana si”, aseguró la alcaldesa de Tijuana.
Una realidad que ahora preocupó a los ambientalistas en Tijuana que por años han realizado mediciones de los niveles de contaminación ahí.
“Podemos ver una vez más que cuatro playas en las que fue tomada muestra debido a que esta vez no pudimos tomar muestra en parque México, salieron no aptas para su uso recreativo”, informó Fernanda Rochin, ingeniero químico en la asociación de proyecto fronterizo de educación ambiental.
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Mediciones que se sumaron a las realizadas por la COFEPRIS hace solo unas semanas en la ciudad, donde indicaron que las playas de Tijuana rebasaron los límites de contaminantes. Sin embargo, la alcaldesa dijo que los niveles habían pasado justo al límite.
“Revise ayer con dirección de protección al ambiente y me dice, si están como aptas, pero están así como de panzazo, salimos en el margen de que si las puedes usar, pero no en un margen que es el optimo”, aseguró la alcaldesa de Tijuana.
Un hecho con el que no concordaron los ambientalistas.
“No estamos pasando de panzazo, hay un problema muy serio”, señaló Margarita Díaz, directora de proyecto fronterizo de educación ambiental.
Mientras tanto la secretaría de turismo ya se prepara para recibir a los turistas que ahora ya adornan la zona de playa y para los comerciantes el que esta permanezca cerrada, aseguraron que les afecta.
“Esta mal porque tenemos todo el año aquí trabajando con las piñas coladas y las brochetas de camarón no es posible que esté cerrada aquí y en Rosarito esté abierta”, señaló Esteban Trujillo, comerciante en la zona de playas de Tijuana, desde hace cinco años.
Desafortunadamente, los números en contaminantes no son alentadores y los números de contaminantes aseguran los ambientalistas ya son permisivos en México.
“La organización mundial de la salud dice 100, número más probable deben de cerrarse las playas porque hay un riesgo a la salud, México pone 200, estamos hablando de miles, la playa no debe de ser abierta”, señaló Díaz.
Por otro lado, la secretaría de economía no concordó con los datos que de acuerdo a la COFEPRIS la ponen por encima de los 200 entero cocos, y aseguró que son solo unas cuantas, las playas afectadas.
“Las playas donde acostumbras disfrutar los vacacionistas están libres de está contaminación, si hay zonas donde está contaminada y bueno hay letreros donde lo determinan”, aseguró Mario Escobedo, secretario de economía y turismo en Baja California.
Mientras tanto, los comerciantes en Tijuana, esperan que durante los siguiente días, se les haga el milagro de generar más recursos durante la llamada Semana Santa.
“Por ser semana santa, todo el año esperando esto para que las tengan cerradas, como comerciantes es como nos alivianamos”, dijo Trujillo a TELEMUNDO 20.
La secretaría de economía informó que de momento ya trabajan en un proyecto estatal de casi 200 millones de pesos que frene con un recolector costero la llegada de aguas negras al mar, por parte de fraccionamientos y viviendas, principal razón de los contaminantes que llegan a las playas de Tijuana y Rosarito.
