SAN DIEGO - Bryan Escobedo, de 18 años, Ethan Peaslee-Guerrero de 19 años, y Omar Morales de 18, son tres de los cinco sospechosos de haber participado en el asesinato de Erick Balanzar, de 14 años quienes se presentaron frente al juez el jueves virtualmente.
La familia de la víctima estuvo presente en corte.
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“Queremos justicia por lo que ellos hicieron”, clama Perla Balanzar, hermana de la víctima. “No se me hace justo porque ellos ya están grandes, ellos no lo pueden decir que lo hicieron sin pensar. Ellos lo planearon. Eran cinco o pudieron haber sido más”.
Sin embargo, tras las acusaciones, por medio de sus abogados, se declararon no culpable. Un hecho que lastimó aún más a la familia del menor fallecido.
“Eso es muy injusto para nosotros. Perdí a mi hermanito, mis papás perdieron a su hijo y es muy doloroso para nosotros”.
Erick Balanzar fue baleado a muerte el pasado lunes desde un auto en movimiento en la comunidad de Mount Hope. Más tarde, tras haber huido, los sospechosos fueron arrestados con la ayuda de varios testigos que lograron anotar las placas del vehículo.
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Y hoy, en corte, la jueza les negó la oportunidad de salir libres bajo fianza.
De ser hallados culpables, enfrentan la posibilidad de pasar el resto de sus vidas en prisión y es que además de su presunta participación en la muerte de Balanzar, se sospecha que están relacionados con violencia pandillera.
“No tenerlo a él con nosotros va a ser diferente, no poder escuchar su risa, su voz y no poder llamarle, ya no me va a contestar y es muy doloroso”.
Este día para familia de la víctima fue otro duro golpe, ya que no solo estuvieron en la audiencia, sino que además tuvieron que ver virtualmente a quienes se les acusa de haberlos separado por siempre de su ser querido.
“Era muy buen hombre, tenía un buen corazón, siempre era feliz, escuchaba música, le gustaban los carros”.
Hasta el momento quedan pendientes los cargos de los dos menores de edad que también han sido relacionados con el homicidio.
Uno de ellos, se presentará este viernes en la corte juvenil, y el quinto arrestado, quien los fiscales creen que fue el que disparó, tiene su audiencia el próximo lunes.
“Eran cinco y ya estaban grandes, y se me hace injusto que hayan planeado esto para quitarle la vida a un niño de 14 años y se me hace injusto que tuvieron que planear esto para quitarnos a nuestro hermano”.
Los jóvenes siguen siendo solo sospechosos, al menos que lleguen a ser encontrados culpables, pero mientras eso se decide, la familia de Erick a quien describen como alegre, espera solo una cosa.
“Nosotros queremos que ellos paguen por lo que hicieron”.
Entre los cargos que enfrentan los sospechosos se encuentra el de asesinato y se cree que éste incidente fue el resultado de una pelea. En cuanto a la víctima, se sabe que era un estudiante, quien cursaba su primer año en la preparatoria King Chávez.
