SAN DIEGO- La reapertura de California aunque fueron excelentes noticias para muchos, para algunos este 15 de junio les provocó emociones encontradas cómo felicidad, tristeza y hasta temor.
“Un año muy diferente y duro”, expresó Alberto Zúñiga, a quien el COVID-19 le arrebató a su padre.
Fueron un total de 453 días de incertidumbre, muertes, sufrimiento y pérdidas económicas en la región.
“Es como un parte aguas, así como antes del COVID(-19), después del COVID(-19), va a ser el nuevo AC/DC”, comentó.
Zúñiga señaló que este 15 de junio será como un antes y después de que él y su familia cayeron en las garras del COVID-19, y perdió no sólo a su padre sino a varios familiares.
“Fueron muchas personas las que perdimos, gente importante, muchas personas mayores, perdimos nuestra historia, perdimos lo que le iban a contar a las generaciones futuras”, señaló.
Por lo que este 15 de junio además de venir con menos mascariilas y restricciones, para el latino le trajo emociones encontradas.
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“Ya es una esperanza enorme de poco a poco vamos a regresar a la normalidad”, agregó.
El latino también comentó que espera que sus hijos, Jessica y Alberto, puedan volver a disfrutar de la vida, sin ningún temor.
“El miedo de que les vaya a pasar algo a ellos, ya está pasando, estamos mas cerca de que se acabe esto y dejarlo atrás”, señaló.
De hecho, mencionó que su madre se rehusaba a vacunarse contra el COVID-19, pero que la convenció, y ahora utiliza su historia de haber padecido COVID-19, y perder a su padre, para convencer a otros a que reciban la inyección que pudiera salvarles su vida.
