SAN DIEGO- Al mismo tiempo de un auge en los contagios de COVID-19, los alumnos regresaron a las aulas, lo que generó preocupación en varios padres de familia.
“Si hay inseguridad, con la nueva variante que no sé cuántas más hay ya, si me preocupa que se vayan a enfermar", dijo Francis Ramírez, madre de familia.
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A partir de este lunes, millones de niños a lo largo del país regresaron a la escuela, al mismo tiempo que los casos de COVID-19 incrementaron.
De hecho, el condado de San Diego registró el segundo mayor número de hospitalizaciones por COVID-19 en el estado, según cifras estatales, lo que no dejó de preocupar a Francesca de 13 años, quien está vacunada.
“Cuando veo a mis amigos que no están comiendo o estamos caminando les digo ponte el tapabocas estamos en una pandemia", dijo la estudiante.
Francesca acude al Distrito Escolar de Chula Vista, y su primer día de clases es el 11 de enero.
Y según Ramírez, esta semana será de preparación, cómo hacerles la prueba del coronavirus a los estudiantes, las cuales se pueden obtener en la escuela de sus hijos.
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“Tanto para ellos que estén tranquilos de regresar a la escuela como nosotros también estar tranquilos que no vamos a llevar ningún contagio a los demás", comentó la madre.
El Distrito Escolar Unificado de San Diego, el segundo más grande del estado con más de 121,000 estudiantes, abrió sus puertas este lunes tras las vacaciones.
Pero algunos padres como Laura Rhoa de Encanto, prefirieron no enviar a sus hijos a la escuela.
"Estoy esperando los resultados, estoy segura son negativas", dijo Rhoa, madre de tres niñas.
Cuando estudiantes del Distrito Escolar de San Diego salieron de vacaciones en diciembre, llevaron consigo pruebas caseras de COVID-19, las cuales fueron distribuidas por su escuela con el propósito de proteger a los pupilos y docentes del temido virus.
