SAN DIEGO- Después de la decisión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden de frenar la importación de petróleo ruso, se tuvo una reacción mixta por parte de los sandieguinos ante un aumento histórico en el precio de la gasolina en la región.
Y es que Estados Unidos no importará más petróleo ruso.
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“Me pareció perfecta la declaración, pero al mismo tiempo me parece que es una reacción”, dijo Silvio Canto Jr., profesor de ciencias políticas.
El anuncio de Biden reforzó las sanciones al gobierno de Putin, y llegaron cuando el precio de la gasolina en California sobrepasa los $5 por galón.
“Me siento muy mal. Nos está afectando todos. No es justo, pero que podemos hacer”, dijo Marco Bejerano, disgustado con el precio de la gasolina.
“Va a haber un derrame de los mercados financieros a la economía real, y eventualmente los precios van a seguir subiendo de la gasolina”, dijo Daniel Pérez, profesor de finanzas.
Biden les pidió a los estadounidenses que vean esta sanción como un sacrificio más para debilitar la economía rusa y obligar a Vladimir Putin a detener su invasión militar en Ucrania.
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“Nos va a afectar a todos, la economía, los camioneros, Uber, a mucha gente. Dependemos mucho de los carros y ahora con esto va a será más difícil”, dijo Bejerano.
Otro de los afectados es Erick Bueno, quien usa su auto para repartir paquetería de Amazon Fresh.
“Casi todos los días yo le pongo gasolina a mi vehículo y gasto aproximadamente entre $25 y $30 al día”, señaló Bueno.
Otra de las medidas implementadas por la administración de Biden y los aliados occidentales fue la liberación de 60 millones de barriles de petróleo de la reserva federal para contrarrestar la subida del costo de la gasolina en Estados Unidos.
“Con ese anuncio de la reserva estratégica el precio del barril subió bastante, entonces a corto plazo no va a tener un efecto estas negociaciones que pueda tener la administración de Biden con el régimen de Maduro”, agregó el profesor de finanzas.
Otra alternativa, a la cual recurrió la administración Biden fue enviar una delegación a Venezuela para coordinar con el régimen de Nicolas Maduro la posibilidad de que Chevron, la última compañía petrolera estadounidense que opera en Venezuela, aumente su producción y tal vez exporte nuevamente petróleo a las refinerías del golfo, para lo cual Estados Unidos tendría que negociar con el régimen de Maduro.
“Si tú vas a negocias con Maduro, tienes que negociar en una posición de fuerza; e ir a Venezuela en estos momentos, Maduro sabe que nosotros necesitamos petróleo, yo no creo que estemos en un momento de fuerza”, dijo Pérez.
Mientras que la incertidumbre de hasta dónde llegará el costo del combustible está vinculada a la de hasta donde avanzará la invasión rusa a Ucrania.
“El petróleo es un arma de seguridad nacional, Putin lo está usando como un arma contra Europa, y nosotros debemos usarlo en contra de él”, agregó Pérez.
Reiteradamente se ha hablado de la necesidad de aumentar la producción de petróleo en suelo estadounidense para independizarnos de la importación de más de 600,000 barriles diarios de Rusia.
“Aunque nosotros incrementemos nuestra producción aquí en Estados Unidos, eso desafortunadamente no va a cambiar el precio del petróleo a nivel internacional, entonces en corto plazo no hay mucho que el gobierno pueda hace, pero una de las cosas que si puede hacer el gobierno es suspender temporalmente los impuestos federales por gasolina, esos son aproximadamente 18 centavos por galón”, dijo Pérez.
Además, según el académico, se estima que el precio de la gasolina subirá y no descenderá hasta dentro de 9 meses o un año.
