SAN DIEGO- Ahora más que nunca, el COVID-19 está obligando a inmigrantes indocumentados a vivir bajo las sombras. De acuerdo a Rafael Larraenza de los Ángeles del Desierto, personas indocumentadas tienen miedo alertar a las autoridades en caso de posibles síntomas del coronavirus por miedo a ser deportados.
Argelia Díaz, quien cuida de su abuela de 93 años dijo que es lo último que personas sin documentos legales hicieran por temor a que sea el fin de su sueño americano.
La organización de Los Ángeles del Desierto reparte víveres, artículos de primera necesidad, guantes y cubre bocas a las casas de personas de bajos recursos, y a personas mayores que no pueden o deben salir de sus hogares, y que no pueden recibir ninguna ayuda en estos momentos de crisis.
Hernández dijo también que debido a que la comunidad inmigrante esta marginada, les hace falta mucha información.
De acuerdo al abogado de inmigración, Cesar Luna, el servicio de inmigración no piensa afectar la situación migratoria de las personas que soliciten ayuda médica a causa del COVID-19.
El mensaje es que sin importar su estatus migratorio, las personas deben de acudir a centros médicos si piensan haber sido contagiados porque lo primero es la salud y después la situación migratoria.
Y si desea hacer alguna donación a la organización de Los Ángeles del Desierto, se puede llamar al (619) 773 3688.
