SAN DIEGO- Con un minuto de silencio, portando mascarillas, y batas blancas decenas de trabajadores en el sector de salud se postraron arrodillados para unirse a la lucha contra el racismo en el sistema de salud pública.
“Parte de la comunidad de la medicina todos estamos aquí para apoyar lo que está pasando y dar un poquito más de información en como el racismo crónico puede afectar la salud de la paciente”, aseguró Sandra Cervantes, ginecóloga de la clínica en Logan Heights.
Según estadísticas, una mujer afroamericana embarazada es mas susceptible a tener complicaciones durante el embarazo que una mujer blanca.
El CDC indica que el costo de seguro médico, los retos financieros asociados con la falta de empleos desvanecen la calidad de salud de las minorías entre ellos los afroamericanos.
“Eso si es una cosa que puede pasar, pero si nosotros estamos haciendo y usando las cosas que necesitamos usar como las mascarillas lavándonos las manos yo pienso que no vamos a ver que se vayan a subir los casos que se habían subido en días pasados”, indicó Cervantes.
Los mas aplaudidos por su heroica labor contra el COVID -19 se unieron para contrarrestar las diferencias sociales en la salubridad.
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“Los datos alarmantes que nosotros tenemos sabemos que las mujeres de raza negra tienen el riesgo cuatro más veces que las mujeres de raza blanca que se pueden morir de complicaciones durante el embarazo”, señaló Cervantes.
Según el CDC los afroamericanos tienen una calidad de salud mas baja por no tener seguro médico en comparación con los blancos, los hispanos tienen casi tres veces mas probabilidades de no tenerlo y los de raza negra suman el doble de probabilidad debido al costo.
“Necesita más educación y experiencia para las personas de color para hablar con los doctores y tener a una persona que entiende a la comunidad porque en nuestra comunidad tenemos problemas diferentes como diabetes”, dijo Jasmine Ezell quien lucha por la igualdad.
