EL CAJON- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden dejó claro que la guerra en Afganistán terminó para los estadunidenses. Pero la retirada de las tropas, dejó muchas interrogantes, mientras que algunas familias de El Cajon fueron rescatadas a tiempo, pero por lo menos una quedó atrás.
El distrito escolar de Cajon Valley informó que cuatro familias regresaron a salvo de Afganistán. Se trata de un total de siete adultos y 14 niños de vuelta a sus casas en El Cajon. Pero aún queda una familia con tres estudiantes que fueron abandonados en Afganistán y que exploran las estrategias para traerlos a casa.
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“Ya que nos fuimos y todas las armas que dejamos, la imagen del país es horrible después de esto, el 20 aniversario del 11 de septiembre en un par de semanas será de ellos poniendo la bandera del talibán sobre la embajada de los estados unidos, diciendo ganamos. Cuando en verdad no ganaron nada, no ganaron ninguna batalla”, explicó Silvio Canto Jr., politólogo. “Mi hijo estuvo en el ejército, mi hijo estuvo en Afganistán un año y era por patriotismo, ellos veían un enemigo a la nación, y ellos pelearon por eso. Y yo te puedo decir que la moral del ejército en estos momentos está por el piso, y eso no es bueno porque es un ejército voluntario”.
Y menos de 24 horas después, escuadras militantes del talibán se apoderaron de los equipos militares y de combate abandonados por los estadounidenses, que evacuaron a más de 100,000 personas en 18 días. En medio de la desesperación de los afganos, costándole la vida a 13 militares.
“Pero Estados Unidos hizo un gran papel en Afganistán, no construimos una democracia, pero ese no era el objetivo. El tema era de seguridad nacional, pero, por ejemplo, las mujeres pudieron ir al colegio”, agregó.
Con el despegue del último avión C-17, quedaron atrás planes de desarrollo político y social en la nación, al igual que casi 200 estadounidenses que no pudieron salir antes de la fecha establecida por Biden, y que luego la jefatura del talibán exigió que fuera cumplida por Washington.
Biden dijo en una conferencia de prensa este martes, 24 horas después de la salida de las tropas, que ellos suponían que más de 300,000 efectivos afganos entrenados por Estados Unidos iban a apoyar al gobierno afgano en contra del talibán. Y fue un error. Tanto el gobierno como los militares entregaron el poder.
“En los últimos años ha habido un debate en si nos quedábamos o nos salíamos. Pero los dos lados coincidían en que teníamos que salir ordenadamente”, dijo Esther Valdés, abogada de inmigración. “Ahorita el enfoque, desde que salió el ultimo avión de Afganistán, es ayudar a todas esas personas que aun corren riesgo, no por haber colaborado directamente con estados unidos sino por su identidad”.
Riesgos por su identidad religiosa, por ejemplo. Para ellos solo queda una salida.
“Esto califica para la ley internacional de refugiados, pero para que inicie este proceso tienen que salirse de la frontera de Afganistán, y ahorita todo eso está cerrado”, comentó Valdés.
