TIJUANA- Más de un millón de alumnos regresaron a clases presenciales en Baja California, según el gobierno del estado, pero no todos los salones abrieron al 100% debido a la suciedad en las aulas tras casi dos años de ausencia.
TELEMUNDO 20 logró captar cómo maestros y alumnos limpiaron los salones para que los menores pudieran regresar en algún punto de la semana a clases.
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Además, padres de familia pusieron manos a la obra para limpiar los salones, con la esperanza de que sus hijos finalmente regresen a las aulas.
“Estaban en condiciones insalubres incluso en un salón se encontró una tarántula”, comentó Enrique Murray, supervisor de la zona escolar número 30.
Por lo que jabón, escobas y desinfectante fueron necesarios desde el fin de semana hasta este lunes para intentar que los alumnos regresaran.
“Había que desinfectar, que limpiar, que lavar como usted se dio cuenta había padres de familia lavando salones porque las condiciones higiénicas no permitían tener niños ahorita presenciales”, dijo Murray.
Local
Este lunes, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar, confirmó que no todos los alumnos regresaron ante el vandalismo y falta de infraestructura en muchos de los salones de clases.
“Tenemos 2,311 planteles en total, 180 de ellos se encuentran en mantenimiento actualmente por lo cual no pudieron regresar a clases el día de hoy”, dijo la gobernadora.
En Tijuana se notaron las condiciones sucias, donde incluso se pidió a los padres apoyo con material de limpieza.
“Nos pidieron el apoyo de casa, sin hacer un gasto extra, lo que tuviéramos en casa”, comentó Ninive Aguilera, madre de familia en Tijuana.
Y aunque con el regreso a clases también continuó el temor en los padres de familia al COVID-19.
“Un poquito nerviosa, pero estoy consciente de que ya les hace falta hasta cierto punto socializar pues ya son dos años encerrados”, dijo Aguilera.
Los maestros aseguraron que el regreso a las aulas era necesario.
“Salimos a recordar donde están los baños, donde la tiendita, donde pueden comer, donde pueden jugar, para volver a ver como es nuestra escuela”, dijo Tanía Sánchez, maestra de primaria en Tijuana.
Y el regreso a clase también fue acompañado de un protocolo de seguridad, donde el cubrebocas era necesario en gran parte del tiempo en la escuela.
“Adentro del salón todos tenemos cubrebocas, si quieren tomar agua tienen que salir aquí afuerita, se bajan su cubreboca, toman agua y ya pueden regresar”, comentó Sánchez.
Sin embargo, este lunes apenas el 10% de los alumnos en algunas escuelas de Tijuana pudieron sentarse los pupitres.
Mientras que padres de familia fueron vistos comprando uniformes por la ciudad y se esperaba que el martes sea cuando en algunas escuelas como en Tijuana, lleguen más estudiantes a salones más limpios y dignos.
“Necesitamos las escuelas hace dos años que no tienen tienda escolar, necesitamos si no nos dan recursos, materiales, que nos envié todos los materiales para que mis compañeros puedan trabajar”, comentó Murray.
Los directivos de algunas escuelas de la ciudad dijeron que en algunos casos aún mantuvieron reuniones con padres de familia que no quieren llevar a sus hijos y se les informó que el martes tomarán clases sin luz e infraestructura necesaria en su salón de clases.
Y la gobernadora de Baja California agregó que se contemplaba un presupuesto de casi 300 millones de pesos para restaurar las 180 escuelas que este lunes no pudieron operar debido a las deficiencias en infraestructura y afectadas por el vandalismo en el estado.
