ROSARITO- Este 2 de noviembre en el Día de los Muertos, una fecha muy especial para recordar a los seres queridos que ya partieron, fue muy diferente este año.
Y es que sólo en el municipio de playas de Rosarito se permitió el acceso a la cementerios. Dónde las familias no perdieron la oportunidad de rescatar la tradición en medio de la pandemia.
La música ha unido a la familia Escalante, y este día decidieron acudir a visitar a María de la Luz, abuelita de Florencio, quien comentó a TELEMUNDO 20, que está tradición ha estado siempre presente en su hogar.
“A mi abuelita le gustaba vernos juntos escuchar música y pues un día bonito para todo México porque siguen la tradición y aquí estamos”, dijo.
En el Día de los Muertos, la familia Escalante se reunió en el panteón municipal de Rosarito. El único municipio de Baja California que permitió la apertura de cementerios en esta fecha tradicional mexicana donde se dieron cita los rosaritenses como José Escalante.
“Venimos a visitarla y pues aquí estamos reunidos la familia”, señaló.
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A 9 meses de la partida de su esposa, afirmó que la vida ya no es igual.
“Cincuenta años juntos y nueve de familia, si hace falta ya cuando se acaba la cabecera grande queda la familia ya no es igual”, dijo.
Así como ellos, cientos de familias llegaron hasta el cementerio para no perder la tradición. Un acceso controlado por toma de temperatura y vigilancia permanente para mantener los protocolos sanitarios y evitar cadenas de contagio.
En el andador principal del panteón municipal diferentes puestos de flores y otros productos fueron instalados estratégicamente para respetar las medidas de prevención, sin embargo, la flor de cempasúchil fue la protagonista.
“Si las cempasúchil es la buena de cada año la que más piden este año es un poquito de escases porque si se acabó rápido aquí en Rosarito en todos los campos, ayer vendimos 600 bonches y esto es lo único que queda”, dijo José Cotero, vendedor de flores en el panteón.
Pero no solo los vendedores de flores se vieron beneficiados con la apertura del cementerio. También comerciantes de alimentos como Celso Torres.
“Hay mucho espacio no estamos tan amontonados como el año pasado”, comentó.
Es un día para recordar a los muertos de una forma especial.
María Rosa Juárez, originaria de Michoacán dijo que esta tradición debe de ser fortalecida en la frontera.
“Porque nuestro pueblo siempre traemos esa tradición y nunca la hemos dejado”, comentó Juárez.
Con sus pequeños ayudantes limpia las tumbas de sus hijos pues asegura este día de muertos, la tradición vive en ellos.
“Voy a adornar de flores Voy a poner la ofrenda y ya todo lo que todo lo que estemos aquí”, apuntó Juárez.
Una tradición que en Rosarito sobrevivió a la pandemia.
