Cansados de la corrupción y la impunidad que impera en el estado mexicano de Quintana Roo, un grupo de autodefensas hizo una polémica invitación a los integrantes del crimen organizado.
"Los autodefensas le pedimos a todos los narcotraficantes, declararle la guerra a todos los políticos corruptos que roban y extorsionan utilizando la bandera de los narcotraficantes para esconder sus actos criminales", expresa Carlos Mimenza, líder de autodefensa en Quintana Roo.
El llamado se dio a conocer en un video distribuído por redes sociales, donde también se afirma que son las propias autoridades las que están detrás de la extorsión a empresarios y ciudadanos.
"Recuerden señores narcotraficantes, gran parte de la riqueza de los políticos corruptos ha sido utilizando sus nombres, inculpándolos a ustedes de todos sus actos de corrupción", subraya Mimenza.
El hombre del video es Carlos Mimenza, el empresario líder del grupo que asevera que para acabar con la corrupción es necesaria la justicia hecha por propia mano.
"Creo que ya es hora que los propios narcotraficantes tomen cartas en el asunto y empiecen a poner orden que el enemigo no somos la sociedad el enemigo común sin lugar a duda son los políticos", afirma Mimenza.
Adecir de Ricardo Ravelo, especialista en temas de seguridad nacional, Quintana Roo atraviesa por una de sus peores crisis en materia de inseguridad y violencia, y considera que todo es provocado por la complicidad entre políticos y delincuentes.
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"La mayor parte de estos pequeños grupos los encabezan políticos(...) están metidos en delincuencia organizada operando tráfico de drogas, secuestro y extorsiones", asegura Ravelo.
En su desesperación algunos quintanarroenses apoyan al grupo de autodefensas, pero temen que su intervención solo genere más enfrentamientos violentos.
"No me gustaría saber las repercusiones que va a dar, pues darle más poder de parte del pueblo pues al narcotráfico...", advierte Agustín Martínez, uno de los habitantes de Quintana Roo.
El grupo de justicieros se conformó el 27 de junio, día en que los empresarios ofrecieron celulares y boletos de avión como premio a quien denunciara a los políticos corruptos.
