TIJUANA- El fin de semana largo por el Día del Trabajo trae esperanza al sector turístico en Tijuana a pesar de los llamados a no cruzar la frontera para aminorar los riesgos de contagio. Sin embargo, este puente laboral en Estados Unidos es la última esperanza que tienen los comerciantes de la Avenida Revolución en Tijuana para una recuperación económica.
Julián Palombo Saucedo, presidente de los comerciantes turísticos de la avenida revolución estima un aumento en ventas de un 30% durante viernes, sábado y domingo.
Ignacio Ávalos, comerciante turístico Comentó a Telemundo 20 que con el Día del trabajo en los Estados Unidos dan por finalizada la temporada de mayores ventas en el año, pero que este 2020 se ha visto severamente afectada.
“Es la última semana y queremos aprovecharla esperamos que haya gente, porque de ahí en adelante ya empieza a bajar el negocio”, dijo.
Y es que más de cuatro décadas de experiencia lo avalan. Don Ignacio lleva trabajando 43 años en la Avenida y aunque son momentos difíciles por la pandemia no pierden la esperanza.
Sin embargo, las restricciones de cruce y los tiempos de espera pueden ser un factor que inhiba el turismo.
“Lo que está haciendo Estados Unidos de que no vengan este fin de semana por la pandemia y todo no creo que nos va a ir bien”, dijo Erasmo González Comerciante de Avenida Revolución.
Local
Sin embargo, es el turismo hispano aquellos que mantienen la expectativa positiva en todos los que viven de la venta de artesanías y ahora también de cubrebocas.
“Mexicano que vive al otro lado como que no les interesa y ellos vienen, pero ojalá y vengan los vamos a esperar aquí a ver si sube poquito de la venta” señaló sin Erasmo.
“Por la pandemia no me preocupo pues si me va a pegar me va a pegar donde sea si en Estados Unidos o aquí” comentó Jaime Rodríguez, Turista de Estados Unidos.
Y aunque se espera un incremento de visitantes, los más beneficiados son los restauranteros, no así los comerciantes de todo tipo de artesanías como don Erasmo, quien afirma que en los 49 años que lleva como comerciante turístico, ésta ha sido la peor temporada de verano que ha vivido la revolución.
“Estuvimos como casi tres meses y sin ganar nada, pues aquí si no vendes, no comes”, puntualizó.
