TIJUANA- Este fin de año ha sido difícil para muchos, especialmente para quienes han sido afectados por la pandemia de COVID-19. Incluso algunos pasarán esta Navidad sin un techo, como en el caso de residentes de la colonia Cumbres del Rubí, cuyas casas fueron incendiadas por los recientes incendios en Tijuana.
Y quienes lo perdieron todo, recibieron un poco de apoyo por parte del Club de motos Cimarrones Tijuana. Y se podría decir que Santa llegó al poblado calcinado para llevarle algo de alimento caliente a quienes lo perdieron todo, pero en vez de aparecerse en trineo lo hizo en moto.
“Es humanitario esto, vimos un desastre donde realmente hay necesidad y buscamos la forma de ir a apoyar”, comentó Rafael Bautista Méndez, Presidente del Club de motos Cimarrones Tijuana.
Y es que manos amigas y dispuestas es lo que necesitan los pobladores de Cumbres del Rubí, en Tijuana, que vieron sus casas arder durante los incendios de la semana pasada.
“Están en el ojo de la gente, siempre en el pensamiento que hay necesidad y se les va ayudar”, señaló Bautista Méndez.
El club de Motos Cimarrones Tijuana puso manos a la obra y condujeron sus motocicletas hasta el barrio cargados con tamales, y desayunos para los afectados.
“Hay gente muy mayor, me comentaron de una pareja de 75 años que no tienen trabajo estable, ni quien las ayude, y muchas veces la gente llega con madera, pero que van a hacer ellos con la madera”, comentó Bautista Méndez. “Alguien les tiene que ayudar a construir o reconstruir una chocita, y a lo mejor se requiere más ayuda de parte de nosotros”.
El Club de motos Cimarrones Tijuana recorre Baja California desde hace 5 años.
“Una charla, y una unión y un cotorreo y terminamos haciendo el motoclub”, comentó Bautista Méndez.
Una hermandad que circula sobre dos ruedas, y que dicen “presentes” cuando la comunidad los necesita, sobre todo durante la pandemia
“Tenemos tres casos”, dijo Bautista Méndez, sobre contagios del COVID-19, que llegaron al club.
“Primer cuando lo empieza a ver uno dice, no eso es algo fantasioso, y cuando lo empezamos a vivir dentro del grupo dijimos ah caray, si existe y hay que tener mas cuidado”, señaló.
Más de 30 casas fueron incendiadas durante los recientes incendios, y algunos residentes buscaron refugio con familiares o amistades, otros prefirieron quedarse y cuidar el terreno donde estuvo su casa.
