Una demanda entablada el viernes alega que podrían existir sociedades secretas formados por sus mismos oficiales, que utilizan tácticas violentas y cuestionables en el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles.
Los abogados de dos familias que entablaron la demanda, aseguran que hay grupos clandestinos dentro del departamento que promueven este tipo de tácticas, posiblemente hasta con motivos raciales.
Un tatuaje en la pantorrilla con una calavera en un caso militar con las letras CPT por Compton, y con un rifle y llamas, le pertenece al agente del sheriff Samuel Aldama.
Durante un interrogatorio, un oficial reveló que otros 20 miembros del alguacil podrían tener un tatuaje similar. En su testimonio admitió tener una animosidad en contra de los afroamericanos.
El agente Aldama estuvo involucrado en la muerte de Donta Taylor en Compton, en el 2016, que según una demanda estaba desarmado y fue asesinado a mansalva por los uniformados sin justificación.
Las denuncias de supuestas sociedades secretas dentro del departamento han manchado, dicen, la reputación de esa entidad por décadas. Existen especulaciones de que los tatuajes son parte de sus rituales.
Ante los nuevos alegatos, el jefe del alguacil aseguró en un comunicado con lo siguiente:
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“Vamos a examinar el problema de los tatuajes, nuestra cultura y la cultura de los tatuajes en la sociedad en general, lo cual pudiera ser, o no, un indicador de que algo más serio está pasando”.
Según los alegatos de los abogados, estos mismos agentes involucrados en el tiroteo mortal de un afroamericano, también en el 2016 y sin una causa aparente, persiguieron y golpearon agresivamente a este joven quien, alegan, tampoco estaba armado.
El oficial Aldama continúa trabajando para el sheriff en la estación de Compton, mientras que su compañero fue separado de su cargo en el 2017 por otro incidente.
