Hoy es un motel como cualquier otro, habitaciones, huéspedes, y alberca, pero pronto eso podría cambiar. Se ubica en la avenida Palm, en la zona de Nestor, autoridades buscan transformarlo en un centro de transición para infractores de crímenes de bajo nivel, lo que no ha caído muy bien entre residentes.
“Que se llega escapar alguno de ellos, y pues que sea un criminal muy peligroso”, dijo Héctor Pedrín residente de Nestor.
Pedrín vive a menos de una milla del motel, en un vecindario que describe como familiar y tranquilo, y donde dos de sus hijos acuden a una de las 4 escuelas que se encuentran en el área. “(No queremos que) pongan en riesgo aquí a la gente, ya cometieron un delito menor, y ahora quieran hacer pues un delito mayor verdad”.
El regidor de San Diego David Álvarez, afirma que el proyecto llamado “Smart” y que busca reintegrar a los infractores a la sociedad, nunca tomó en cuenta a los vecinos.
“Son personas que están saliendo del sistema penal, y los están poniendo en este hotel con menos seguridad”, dijo Álvarez.
Residentes dicen que además es un golpe al turismo y a la economía local, pues muchas de las familias que llegan a Imperial Beach no pueden pagar un hotel más caro. El proyecto costaría más de 13 millones que dicen se podrían utilizar en otra cosa.
“Se pueden construir las banquetas que se están despedazando aquí en san diego, se puede invertir en crear empleos, en dárselo a los pequeños negocios para que ellos puedan comprar maquinaria”, dijo Álvarez.
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Esta tarde, el cabildo dio luz verde a la casa para infractores de delitos menores, mientras otros afirman que el proyecto pudo haberse ideado en una zona menos poblada.
“Ellos también tiene derecho y si se van a rehabilitar que mejor, pero si llegan a traer personas tienen que tener cuidado en que no se salgan, y que puedan atravesar la zona”, dijo otra residente de Nestor.