SAN DIEGO – Poco antes de las 11 p.m. del sábado 15 de febrero, la policía de San Diego recibió una llamada en relación a unos disparos en la zona de Linda Vista.
Mientras tanto en el vecindario, un conductor se desplazaba por las calles de forma errática.
A las 10:48 p.m. una cámara de vigilancia, captó el momento en el que el carro tipo sedan de 4 puertas y color blanco, impactó un vehículo Toyota Corolla estacionado cuando conducía por la calle E Hyatt, y dobló a la derecha en la calle Gatling.
La dueña del Corolla, una joven de 17 años, había llegado a casa unos de 10 minutos antes del choque.
Según reportes de vecinos, unos tres minutos más tarde el mismo vehículo sedán blanco, regresó por la calle Gatling en dirección a la calle Hyatt y fue allí donde fue interceptado por la policía y finalmente detenido.
Inmediatamente la calle Hyatt fue cerrada y la policía comenzó a inspeccionar el lugar en donde encontraron la camioneta pick-up de Silvino Gutiérrez baleada.
“Tiene un balazo allí, tiene uno allí en el cofre, otro allí abajo, ese balazo pasó de ahí de en frente al lado de atrás y la llanta de atrás también me la poncharon”, dijo Gutiérrez, mientras señalaba los daños que el tirador le causó al vehículo que usa a diario para su trabajo en la construcción.
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Cinco de los balazos de los aproximadamente 10 que reportaron escuchar los vecinos cayeron en el auto de Gutiérrez, dejándole el parabrisas y el vidrio trasero roto, y una llanta dañada.
Pero a pesar de este ser este el carro de su sustento diario, agradece que nadie salió herido.
“Lo bueno que no había nadie en el carro a la hora que tiraron los balazos, que estaba vacía pues, mejor que fue la camioneta y no alguien”.
Por su parte, su esposa Araceli Arias, revivió el miedo que sintieron al llegar a casa y ver la calle de su hogar tomada por la policía.
“Le decíamos pues al policía que si nos dejaba o que si podían ellos pasar, verdad, no vaya a ser que hayan entrado por atrás y se hayan metido en la casa”, dijo Arias.
Vecinos dijeron que aparentemente, este pistolero que casi parecía estar jugando a la ruleta rusa al volante, habría salido de una fiesta que se hizo en el mismo vecindario.
Sin embargo aún está por esclarecerse si los tiros fueron lanzados al aire o si el tirador tenía un blanco, pero lo que sí está claro es que ninguna persona salió herida.
Por ahora, Gutiérrez y su esposa esperan que el seguro que tienen pueda cubrir la mayor parte de la reparación de su vehículo, mientras que al padre de la joven dueña del vehículo Toyota Corolla, le tocó reparar el carro por si mismo, pues no contaban con seguro, ni dinero para llevarlo a un mecánico.
