día de las madres

Madres presas comparten la angustia de estar lejos de sus hijos

Telemundo

Para cualquier persona estar confinada representa tener que superar retos insospechados, pero si a eso le añades la incertidumbre diaria de si los hijos comieron o hicieron la tarea, entonces la angustia es monumental.

Ruth Castañeda cayó en el mundo de las drogas siendo muy joven y en el transcurso de la vida se convirtió en madre de seis hijos. Debido a sus adicciones ha sido difícil formarlos como le hubiera gustado.

"Yo me entregué para cambiar mi vida, para ser una buena madre para mis hijos", expresa Ruth con cierta tristeza en su voz. "Ahora quiero ir a la escuela y ser enfermera", añade.

En el Centro de Detención Carrizalez Rucker del Condado Cameron, Ruth vive en una angustia constante. A diario se pregunta si sus hijos comieron o hicieron la tarea. Pero la duda más grande es cuándo será el día que los vuelva a abrazar.

Alicia Cruz también se encuentra confinada en Carrizalez Rucker, donde dice vivir una doble condena al estar tras las rejas y no tener a sus hijos.

"Este es el último lugar que una madre quiere estar o tener a sus hijos, pero he dicidido verlo por el lado positivo", expresa Alicia, quien es madre de tres, siendo el menor de tan solo cinco años.

"Yo solo me imagino qué él debe pensar, que dónde estoy…", añade Alicia. De todo, lo más difícil es no estar con ellos en las fechas especiales como cumpleaños o Navidad.

Independientemente de las circunstancias, madre solo hay una y el vínculo con los hijos es indestructible sin importar el lugar y el tiempo que transcurra sin que esten juntos.

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