SAN DIEGO- La Junta de Supervisores del Condado de San Diego dividió el martes su paquete de estímulo federal de $334 millones, junto con $5 millones adicionales, para apoyar a pequeñas empresas, ciudades, bienestar infantil, pruebas de COVID-19, y más.
El condado recibió $334 millones de la Ley Federal de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica (CARES, por sus siglas en inglés), pero luego tuvieron que decidir cómo y dónde usarlo.
Propuesto por los supervisores Nathan Fletcher, y Dianne Jacob, la asignación aprobada otorga $175 millones para respuesta COVID-19 del condado, $100 millones para su programa de pruebas, rastreo y tratamiento, y $25 millones a ciudades individuales para gastos COVID-19, excluyendo la ciudad de San Diego porque recibió dinero directamente.
Además, los supervisores aprobaron $17 millones en estímulos económicos para restaurantes y pequeñas empresas, $15 millones para servicios de salud conductual, y $2 millones para servicios de bienestar infantil para ampliar el alcance y el apoyo a las familias en riesgo.
Alrededor de $5 millones del fondo ya se reservaron para ayudar a financiar el cuidado de niños para trabajadores esenciales.
“En lugar de un golpe único de cada pequeña cosa que surge. Consigamos algunos fondos en algunos segmentos que se dirigen a las áreas de mayor necesidad”, dijo Fletcher, antes de la votación.
Local
Una propuesta alternativa de los supervisores, Greg Cox y Kristin Gaspar quería que $50 millones de esos $334 millones se dividieran entre todas las ciudades para sus esfuerzos de respuesta de COVID-19, excepto San Diego.
Eso contrastaba con los $20 millones de Fletcher y Jacob para las ciudades. La oficina del supervisor Cox dijo que las dos propuestas no competían y que todas estaban trabajando juntas.
El dinero podría ser utilizado por las ciudades para cosas como la aplicación de la ley, iniciativas de apoyo económico, cumplimiento de saneamiento. Pero, no podría usarse para la pérdida de ingresos.
El alcalde de Imperial Beach, Serge Dedina, dijo que se sorprendió cuando supo que su ciudad no estaba recibiendo ayuda federal directa.
“Ha sido logísticamente difícil y muy costoso”, dijo. “Al igual que un tsunami, un tsunami económico y un tsunami de salud pública”.
Muchos gobiernos informan una disminución de los ingresos tributarios, suspenden proyectos, suspenden trabajadores, y gastan cada vez más en recursos.
El alcalde de Imperial Beach dijo que su ciudad podría obtener entre $500,000 y $1 millón del condado para ayudar a la infraestructura de saneamiento, la seguridad pública y la salud pública, todas las áreas críticas durante la pandemia.
California en su conjunto recibió $15.321 mil millones en fondos. El Condado de San Diego recibió $334 millones y la Ciudad de San Diego recibió directamente $248.45 millones, según el Departamento de Tesorería de Estados Unidos.
