SAN DIEGO- Cerca de 15 miembros de una familia hispana dieron positivo al COVID-19, y uno de ellos no logró vencer al coronavirus, ya que falleció tras presentar complicaciones dejando a todos con un gran vacío.
"Mi abuelito era un hombre bien trabajador", señaló Melissa Valadez, nieta de Rubén Valadez.
"Le gustaba su cafecito y su pan, y con su comida siempre tenía su Coca Cola al lado. Eso nunca le faltaba", dijo la nieta.
La familia dijo que a pesar de haber estado lastimado de las rodillas, nunca lo veían sin hacer algo.
"No le gustaba sentirse como que dependía de otra gente. Quería hacer las cosas por sí mismo", comentó Rubén Valadez, nieto.
Su abuelo era conocido en su colonia como "Don Rubén" y es que a menudo salía en busca de plásticos y aluminios para reciclarlos y así ganar dinero extra, ya que ya estaba jubilado.
Hace apenas dos semanas, el pasado 5 de enero, "Don Rubén" cumplió 75 años, sin imaginar que ese día sería la última vez que le cantarían las mañanitas.
"Espero que los momentos que vivimos con él, los haya disfrutado porque nosotros sí. Siempre estuvimos felices a su lado", agregó su nieta.
Según sus nietos, "Don Rubén" y su esposa tienen 9 hijos y más de 30 nietos. Y desde que comenzó la contingencia sanitaria, casi nadie visitaba a los abuelos para evitar exponerlos, pero el día de su cumpleaños, algunos fueron a su casa brevemente para celebrarlo para que no se sintiera solo, pero dos días después sucedió lo inesperado.
"Creo que la mitad de la familia ahorita está contagiada", comentó la nieta.
Ella dijo que son aproximadamente 15 los que ya dieron positivo al COVID-19, y algunos otros están aislados esperando los resultados.
"Mi abuelito se contagió, también mi abuelita, y bastantes de mis primos y tíos también", comentó.
Aunque desconocen como se contagiaron, asumen que fue el día que visitaron brevemente a su abuelo solo para felicitarlo.
Desde el contagio masivo en la familia, la mayoría, solo ha presentado síntomas leves, pero "Don Rubén" no corrió con la misma suerte.
"Tenía dificultad para respirar", dijo el nieto.
Según sus nietos, era tanta la desesperación que sentía por la falta de aire, que le dio un ataque de pánico.
"Lo llevaron a emergencias. Mi tía lo llevó al Sharp de Chula Vista", agregó la nieta.
Su abuelo fue admitido a la unidad de cuidados intensivos, pero dos días después, el 11 de enero, perdió la batalla contra el coronavirus. Ahora solo les queda su recuerdo.
"Es muy difícil perder a alguien así y ni siquiera poder consolar a mi abuelita porque ella también está con COVID", señalaron los nietos.
Algunos de sus familiares se han visto afectados económicamente por la pandemia y han tenido que dejar de trabajar porque están aislados, por lo que crearon una página de GoFundMe donde esperan recaudar fondos para los gastos fúnebres.
"Lo queremos y lo vamos a extrañar", dijo su nieta entre lágrimas.
Mientras lloran la muerte de "Don Rubén", buscan que la comunidad sepa que el COVID-19 no tiene piedad de nadie.
"Espero que la gente vea que esto es en serio para que no le tenga que pasar esto a nadie más. Que se cuiden", comentó el nieto.
Los nietos señalaron que su abuelo siempre será recordado como aquel hombre originario de Guanajuato, México que sin importar lo que sucediera, siempre se mostraba feliz.
Se espera que "Don Rubén" sea sepultado en San Diego a finales de este mes y mientras esperan para recibir su cuerpo, están haciendo oraciones para que, según ellos, descanse en paz.