SAN DIEGO- Lugares de entrenamiento físico, como los gimnasios, son algunos de los sectores que se han visto afectados por la pandemia. Pero, con el nuevo permiso de reapertura, muchos ya guardaron el letrero que decía cerrado.
TELEMUNDO 20 visitó un gimnasio en Vista en el primer día de reapertura, y un empleado nos contó lo importante que este día era para él y su familia.
“Hoy desde las cinco de la mañana estuvimos con esto que dice abierto”, comentó Omar Vásquez, entrenador.
Para Vásquez, este martes fue el día que había esperado desde hace semanas.
“Hoy es mi primer día y estamos muy contentos de abrirle las puertas al público”, comentó.
Esto llegó luego que el estado de California le dio luz verde a los gimnasios de volver a operar en su interior, así que este martes, en cuanto llegó a trabajar se aseguró que todo estuviera listo, tanto dentro como fuera, para darle la bienvenida a los clientes de este gimnasio Anytime Fitness de Vista.
“Yo llevo cinco años entrenando. Esta es mi especialidad”, dijo.
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Pero agregó que como entrenador, nunca antes había vivido algo tan estresante, ya que la pandemia lo dejó sin trabajo por varias semanas debido a que los gimnasios se vieron forzados a cerrar.
“Durante ese tiempo estuvimos en desempleo”, señaló.
Algo que fue duro para él y para sus compañeros.
Y ahora que pudieron regresar a trabajar dijeron que los ánimos también volvieron, pero esperan que no les vuelva a suceder lo que ya vivieron en julio cuando se les dio permiso de reabrir, pero semanas después tuvieron que volver a cerrar sus puertas y eso empeoró su situación.
“En ese mes yo perdí varios clientes por la razón de que tenían miedo enfermarse o muchos perdieron sus trabajos, así que no había fondos para pagar una membresía”, señaló.
El entrenador contó que desafortunadamente el gimnasio sí perdió algunos clientes, lo cual además significa una pérdida para su bolsillo, ya que aparte de su salario, recibe comisión por cada cliente que entrena.
“Si no entrenamos a la gente, no ganamos dinero y no le podemos dar de comer a nuestras familias, sin clientes, así que ahora que volvimos a abrir es una bendición para nuestras familias”, comentó.
Una bendición que dijo estar aprovechando y espera que las personas que solía entrenar regresen a sus sesiones, aunque sea poco a poco.
Pero el hecho que gimnasios como este volvieron a abrir, no significa que todo regresó a la normalidad. Hay reglas del departamento de salud que se deben respetar.
“Nada más estamos permitiendo el 10% de nuestra capacidad, lo que significa que en esta ubicación son solo diez personas a la vez”, dijo.
A cada persona que llega deben revisarle su temperatura corporal.
“También tenemos indicadores para que estén separados a seis pies de distancia”, señaló.
Y para que los clientes se sientan más seguros, varios aparatos tienen letreros de fuera de servicio
Vásquez agregó que aunque el espacio aún es limitado para recibir a todos sus clientes a la vez, es posible que este lugar no tenga los mismos ingresos que antes, pero lo que dijo que sí tendrán son las mismas ganas de trabajar.
“Hay que echarle ganas y más porque ya estamos bien, bien felices de poder estar abiertos”, dijo.
Mientras, varios gimnasios del condado permanecieron abiertos al exterior o se trasladaron a parques, este gimnasio en específico no lo hizo, pero el entrenador contó que por un tiempo sí continuaron trabajando con clientes de manera virtual por medio de la plataforma digital Zoom.
