TIJUANA- La falla de San Andrés ha sido tema de diversos estudios incluso ha llegado hasta la pantalla grande en producciones cinematográficas. Por su ubicación geográfica, nos convierte en una zona con grandes posibilidades de tener un gran terremoto.
Estar preparados y saber cómo reaccionar a través de entrenamientos son pieza clave en la cultura de Protección Civil, y por primera vez, desde su creación en 2012, Tijuana fue sede del ejercicio binacional “Fuerzas Amigas 2023”, donde el Ejército Mexicano y Fuerza Aérea coordinaron un escenario hipotético luego de un sismo de 7.2 en la frontera.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Diego aquí.
Fue una práctica donde participaron más de 400 elementos en acción.
“Estamos enfocando a rescatar a personas que se encuentren atrapadas en áreas colapsadas, personas heridas, y atender toda la reconstrucción de la zona afectada”, dijo a TELEMUNDO 20, Víctor Hugo Chávez, general y comandante de la fuerza de tarea “Fuerzas Amigas 2023”.
Entre escombros y una zona de devastación, caos, derrumbes y colapsos hubo personas supuestamente atrapadas en espacios reducidos. Una situación de desastre donde la reacción inmediata es primordial para salvar vidas. En este simulacro la coordinación binacional en esta región del país es pieza clave.
“En áreas fronterizas que afecten a los dos países actuaremos de manera combinada coordinada ambos ejércitos”, agregó Chávez.
México
De acuerdo con la información de la SEDENA, los escenarios del ejercicio binacional se desarrollaron con la búsqueda y rescate de personas atrapadas en estructuras colapsadas, atención de emergencias con materiales peligrosos, y un puesto de recolección de atención médica. Además de la localización de pozos de agua para el empleo de plantas potabilizadoras integradas con equipos para el bombeo, purificación y almacenamiento de agua. Así como actividades de búsqueda, rescate y evaluación aeromédica de víctimas en áreas con edificaciones destruidas y de difícil acceso terrestre y que no cuente con zonas de aterrizaje.
“Tenemos cuatro heridos ahorita ahí adentro afortunadamente con vida solo lesiones leves, pero ya están siendo atendidos”, describió Alexis Gómez, sargento y responsable de uno de los escenarios para el rescate de supuestas víctimas.
De acuerdo con Carlos Cuevas del batallón de atención de emergencias, la práctica incluía además rescate vertical con todas las maniobras necesarias para llegar a la víctima.
“Vamos a descender a los rescatistas para empaquetar a la Víctima y poder extraerla”, mencionó Cuevas.
Hemorragias masivas, facturas, quemaduras serían de las principales atenciones de los heridos, todos clasificados por gravedad bajo el “Tirage”, de acuerdo a su gravedad. Una atención médica al instante para un traslado inmediato a un hospital, en ambulancia terrestre o en helicóptero.
Fue un simulacro impregnado de realismo hasta con familiares de supuestas víctimas, pues en Tijuana los estragos de un desastre natural de esta magnitud podrían ser devastadores.
“Catastróficos en la forma, los daños que pudiera generar sobre todo en vidas en edificaciones, y sobre todo en viviendas si pudiéramos tener bastantes lesionados, y sobre todo edificios que pudieran colapsar y estos ejercicios ayudan a que si estamos preparados cualquier autoridad que llegue va a tomar acciones rápidas”, detalló el director de protección civil de Tijuana, Bernardo Villegas.
Se trató de tropas locales en coordinación con protección civil, bomberos, cruz roja y la fuerza de apoyo para casos de desastre de la Ciudad de México.
Este próximo domingo una comitiva de 160 elementos del ejército mexicano cruzará la frontera para llevar a cabo este mismo ejercicio, pero con las fuerzas armadas de Estados Unidos. Una práctica que, en esta zona sísmica por la falla de San Andrés, puede convertirse en una realidad.
