TIJUANA- Maestros y trabajadores de salud se manifestaron al mismo tiempo, este miércoles, en la región. Ambos grupos reclamaron la falta de pagos y mejores prestaciones al gobierno.
Las deudas con que se encontró el gobierno estatal esta semana que entró en funciones ya tienen afectaciones en quienes trabajan en los hospitales y dentro de las escuelas de Tijuana y diferentes puntos de Baja California.
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Este miércoles, los sectores de salud y educación se manifestaron al mismo tiempo en la ciudad, aquellos que se dijeron en crisis ante la falta de pagos al personal.
La desesperación de los trabajadores de la salud se sintió el miércoles por la mañana, ellos exigieron sus pagos por uniformes y retroactivo en el aumento de sueldo, que eran casi 42 millones de pesos que no se les ha pagado, de acuerdo al sindicato.
“Hemos pasado muchas administraciones y nunca nos habían faltado esos económicos, esos estímulos”, dijo Ana Karina Díaz, trabajadora social en el hospital general de Tijuana.
Las enfermeras aseguraron que las afectaciones por la falta de estos recursos exceden a los que ya viven en casa.
“Nosotros tenemos que pagar renta, agua, comida, gasolina”, señaló Díaz.
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“No tenemos jeringas, no tenemos gasas, no tenemos guantes, que está pasando”, expuso Alma Preciado, quien trabaja como enfermera en el hospital general de Tijuana.
El nuevo secretario de salud, Adrián Medina Amarillas dijo que estaba preocupado por los trabajadores, durante una rueda de prensa para dar avances sobre la situación del COVID-19 en la región.
“Lo vamos a apoyar y lo vamos a estar incondicionalmente pendientes de sus necesidades, del equipamiento de todo lo que necesiten para seguir llevando a cabo con dignidad con seguridad y con orgullo su trabajo y el uniforme puesto de la secretaría de salud”, señaló Medina Amarillas.
Sin embargo, el dinero no llega, lo que hizo que los trabajadores exigieran respuesta a su sindicato, recursos que dijeron les prometió la administración pasada.
“Ellos llegan y no encuentran el efectivo necesario para poder liquidar, ese fue el tema”, señaló Mayra Rendón, secretaria general del sindicato de trabajadores SNTSA.
A esta manifestación, se sumó la del paro de clases en Tijuana y Baja California.
“Un paro de labores total, ningún tipo de actividad educativa se debe de hacer, cuando hablo educativa no es nomas dar clases, sino parar cualquier tipo de actividad en las escuelas y en las oficinas del sistema educativo”, señaló Marco Antonio Pacheco, coordinador estatal CNTE, en Baja California.
Pacheco dijo que a muchos maestros tampoco se les ha pagado ni dado las prestaciones necesarias.
“Son más de 2,500 trabajadores de la educación en Baja California que tuvieron que ser basificados y no se hizo”, agregó Pacheco.
Y este paro de maestros dejó a muchos estudiantes sin clases y a los padres de familia cansados de la falta de precisión del gobierno para terminar con el problema.
“Esto no es de ahorita esto ya tiene años con esto, los profesores están batallando mucho y por ende los alumnos están fallando”, aseguró Jacqueline Díaz, madre de familia de una estudiante de secundaria en Tijuana.
Por lo que este jueves, los docentes en el estado se encuentran convocando a acciones más determinantes para ser escuchados por el gobierno.
Y el sindicato de trabajadores de la salud dijo que la secretaría de salud se comprometió a resolver la situación del personal para el ocho de noviembre, mientras que la secretaría de educación informó que esperaba llegar a un acuerdo con el magisterio.
