TIJUANA- Los albergues en Tijuana terminaron este lunes con su estricto aislamiento que en algunos casos inició desde finales de marzo, para tratar de dar inicio a una nueva normalidad, y permitir que los migrantes salgan a trabajar.
Algunos de los migrantes dijeron que después de estar aislados por más de 60 días, les generó emoción el salir y comenzar a generar recursos.
“Salir afuera para mirar el aire, el aire puro”, describió Damián Carmona, migrante deportado de Estados Unidos, y residente del albergue Casa Migrante en Tijuana.
A pesar de la emoción, Carmona dijo estar seguro que fuera del albergue, todo cambió, esto en comparación con los días que inició su aislamiento, el pasado 23 de marzo.
“Ahora es diferente que cuando llegue yo verdad, ahorita toda la gente anda tapada de la boca, si de las narices”, dijo Carmona.
Sin embargo, aunque el semáforo siguió en rojo, los directivos de los albergues aseguraron que las aperturas eran necesarias.
“Fueron llamados en algunos casos de los lugares donde estaban trabajando”, informó José María Lara, fundador del albergue juventud 2000.
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Y es que la migración no paró, por lo que cada día era más difícil mantener cerrado a nuevos migrantes, hasta 10 personas por día que llegan a los albergues a pedir refugio y que dijeron los albergues, les partía el alma rechazar.
Familias enteras, hombres, mujeres, niños y el saber que tenemos el espacio y no poder darles el servicio
-Gilberto Martínez, administrador del albergue Casa del Migrante en Tijuana.
Por lo que ahora se prepararon para una posible apertura que discutirán la siguiente semana, e incluso instalaron carpas que contarán con camas y ventilación para controlar posibles brotes de coronavirus.
Mientras tanto, Carmona fue uno de los 9 migrantes que se preparó para experimentar sus primeros pasos a una libertad moderada.
“Ya está saliendo la mayoría a trabajar, nomás falto yo y otros dos más”, dijo Carmona.
Un trabajo como guardia de seguridad que empezará desde las 6 a.m., con su sana distancia.
“Cubrebocas, lavarse las manos no acercársele a la gente”, describió Carmona.
Y albergues como el Ejército de Salvación en Tijuana informaron que esperan en un promedio de 15 días o hasta que la secretaría de salud disponga, para recibir a nuevos migrantes y dar inicio a un protocolo donde sean transferidos de ser posible, después de una cuarentena, para prevenir posibles brotes de coronavirus dentro de los albergues.
