TIJUANA- Las autoridades de salud en Baja California declararon que estos son los días más negros de la pandemia. Sin embargo, la comunidad en Tijuana abarrotó las calles y centros comerciales en busca de los regalos para esta Navidad, desde los pasados días.
Y la concentración de personas incluso sin cubrebocas podría desatar un repunte mayor en las próximas semanas, de acuerdo a expertos.
En pleno semáforo rojo, las calles del centro de Tijuana estaban repletas de familias enteras recorriendo centros comerciales y mercados, las compras de último momento elevaron la movilidad en la ciudad y la comunidad ha dejado por un lado el llamado de “quédate en casa”.
“Y en las tiendas ahorita donde fuimos estaba todo estás llenísimo y pues uno con Susana distancia lo que se pueda porque estamos todos como sardinas” comentó Jessica Fabela, residente de Tijuana, a TELEMUNDO 20.
Hay quienes salen por necesidad y se sorprenden al ver las calles llenas, como Everarda de la Rosa quien salió a una consulta médica.
“Las tiendas están llenas de gente que anda comprando para navidad y eso pues si hay bastante”, dijo de la Rosa.
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Y es que en algunos puntos la sana distancia es prácticamente imposible, entre las filas para ingresar a los locales, los puestos ambulantes y la gente en la calle, el espacio para circular es casi nulo. Aún así hay quienes prefieren no dejar pasar la fecha y tener regalos bajo el árbol a pesar del riesgo de un contagio.
“Ahorita no quería salir pero tenemos que salir, es de a fuerzas es necesario salir porque si no dónde compramos los regalos”, dijo Ricardo Pérez, residente de Tijuana.
De acuerdo con autoridades municipales, la movilidad incrementó en un 50% en la ciudad de Tijuana en estas últimas dos semanas, por lo que se ha intentado vigilar de cerca los puntos de mayor concentración como son los centros comerciales de la ciudad a través de operativos de inspección.
“Obviamente que en el primer cuadro de la ciudad tenemos una afluencia muy grande de gente que quiere todavía comprar los últimos regalos para su navidad pero aquí estamos redoblando esfuerzos para realizar las inspecciones y viendo que todos los giros comerciales cumplan con los protocolos”, señaló Luis García, subdirector de inspección municipal de Tijuana.
Lo que causó incluso sorpresa para los comerciantes que obtuvieron un permiso para vender juguetes en el primer cuadro de la ciudad.
“Yo pensé que no que nada iba a ver porque como estamos en semáforo rojo pero si están bien las ventas no como otros años pero si se ha vendido”, declaró Karla Trejo, comerciante del centro de la ciudad.
Y fue justamente esta movilidad lo que elevó el número de casos confirmados de COVID-19, y los contagios que se están dando no solamente en la ciudad de Tijuana sino también en otros municipios de Baja California.
De acuerdo con Alonso Pérez Rico, secretario de salud en la entidad, el incremento en casos se ha registrado a la par en los municipios más grandes del estado.
“Al mismo momento en que se prende Tijuana se aumentan los casos en Mexicali, al mismo momento Ensenada también empieza con este aumento, y esto es derivado de la alta movilidad que seguimos teniendo del pobre miedo que le tenemos ya el COVID-19, la temporada invernal y las endemia que existe entre influenza enfermeras respiratorias agudas y COVID-19”, destacó Pérez Rico.
Una realidad que al menos en este día muchos ponen en segundo término. Incluso quienes salen a trabajar y tienen que atravesar las concurridas calles ven con decepción la poca conciencia colectiva.
“La gente no entiende no usa bien el cubrebocas y si usted observa las fila que hay para comprar regalos para el 15 de enero va a haber más infectados”, dijo José Barrientos, trabajador del sector salud.
La estimación de la secretaría de salud es que el pico de la pandemia sea justamente durante las primeras semanas de enero luego de los contagios que podrían presentarse por estas festividades decembrinas.
Hasta este 23 de diciembre, en Baja California se sumaron casi 31,000 casos de COVID-19 confirmados y 4,981 defunciones.
