MÉXICO - Juan Pablo Delgado es el primer candidato abiertamente gay que buscará gobernar el municipio mexicano de León, del central estado de Guanajuato, uno de los más conservadores del país.
“Me da mucha emoción el hecho de poder mandar el mensaje de que las personas LGBT tenemos la preparación, la experiencia y las posibilidades de competir por cualquier posición pública”, dijo este miércoles en entrevista.
La ciudad de León tiene poco más de 1.7 millones de habitantes y está situada en el conservador estado de Guanajuato, en el centro del país, donde el 83% de la población profesa la religión católica.
Temas como el matrimonio igualitario o la despenalización del aborto nunca han sido aprobados por el Congreso local, cuya mayoría desde hace décadas controla el derechista Partido Acción Nacional (PAN).
Este partido también gobierna el estado desde hace 30 años, y en León lo ha hecho desde 1988, con excepción del trienio 2012-2015.
Juan Pablo Delgado tiene 30 años y busca romper esa hegemonía.
Es abogado y maestro en políticas públicas por la Universidad de Georgetown y cofundador de Amicus, una organización civil creada en el 2015 para defender los derechos de las personas LGBT.
Desde hace un año el partido Movimiento Ciudadano -antes llamado Convergencia- se acercó a él y lo invitó a ser su candidato. Pero fue en los primeros días de marzo de este 2021 cuando aceptó el ofrecimiento.
“Me parece que en un estado en donde los derechos de las personas LGBT no se respetan, es muy importante mandar un mensaje de que las personas LGBT participamos en todas las instancias de la sociedad. Tanto así que podemos competir por la presencia del municipio más grande del estado”, dijo.
Además, resaltó que es necesario terminar con la hegemonía del PAN y de las mismas figuras que se reciclan periodo tras periodo, replicando, apuntó, vicios y abusos gubernamentales.
Juan Pablo Delgado dijo no tener elementos para afirmar que la sociedad de León y de Guanajuato es en general homofóbica, lesbofóbica o transfóbica.
Pero sí para señalar que los liderazgos políticos de la región lo son.
“Sé que puede haber resistencia por parte de algunos sectores que pueden ser bastante conservadores y fundamentalistas. Pero me parece que en realidad quienes abanderan este fundamentalismo son los liderazgos políticos del estado”, subrayó.
Confió en que el hecho de ser un candidato diferente a los que usualmente aparecen en la boleta electoral le da posibilidades reales de ganar las elecciones.
“Me parece que será una campaña suficientemente disruptiva para que las personas que usualmente no están involucradas en la vida política de la ciudad se involucren y consideren que vale la pena participar en las próximas elecciones”.
El 6 de junio, 94 millones de mexicanos están llamados a las urnas para elegir a los 500 diputados federales, 15 de 32 gobernadores estatales, 30 congresos locales y 1,900 ayuntamientos, en lo que se consideran las elecciones más grandes del país.