Pegarle a los pequeños para enseñarles respeto es visto por algunos como un método eficaz de crianza, pero muchos otros lo ven como un abuso.
Un estudio está poniendo en entre dicho el disciplinar con agresión a los menores.
Investigadores de la Universidad de Michigan, advierten que los golpes podrían tener afectaciones negativas en el futuro.
Según el estudio, los golpes en la infancia aumentan el riesgo de padecer trastornos mentales, como la depresión, en la edad adulta.