SAN DIEGO, California. - Todos sabemos lo frustrante que puede ser. Estamos de viaje o de compras cuando de repente nos damos cuenta que nos queda poca carga en nuestro teléfono. El FBI advierte que lo piense dos veces antes de cargar su teléfono en una estación publicada de cargadores.
Hace unos años, NBC News instaló una estación pública para cargar teléfonos a un lado del barco USS Midway en San Diego. Rápidamente varias personas lo usaron e igual de rápido, el reporte mostró que tan fácil sus teléfonos fueron infiltrados.
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Se le conoce como Juice Jacking. Un problema que provocó al FBI en Denver emitir una advertencia sobre los riesgos de conectarse con un puerto USB público frecuentemente encontrados en hoteles, aeropuertos, y algunos centros comerciales entre otros lugares.
“Esos cables [USB] no solo cargan pero también ofrecen la transferencia de datos y esto incluye todo tipo de datos incluyéndome virus y programación maligna,” advirtió Eva Velásquez, Presidenta del Centro de Recursos Contra el Robo de Identidad (ITRC) en San Diego.
“Todas sus fotografías, todas sus claves, todo su historial de geolocalización, digo, piense cuanta información llevan nuestros teléfonos y todo eso podría enviarlo a un desconocido,” agregó Velásquez.
La experta no pudo decirnos qué tan común es este riesgo digital explicando que para cuando la víctima se da cuenta, es demasiado tarde saber dónde y cuándo ocurrió la infiltración..
“Hay tantos puntos vulnerables,” dijo Velálasquez apuntado a la infiltración de datos contra compañías y agencias gubernamentales, y a las instancias cuando uno voluntariamente da su información personal a un estafador como parte de un engaño.
¿Entonces, cómo evitarlo?
- Cargue con su propio enchufe y opte por conectarle a la toma de corrida de alguna pared.
- Use un cargador portátil. Puede ser conveniente pero es más seguro.
- Apague su teléfono al conectarse a un puerto USB público para cargarlo
- No ingrese la clave y abra su teléfono mientras lo carga por más tentador que sea
